miércoles, 30 de septiembre de 2015

Subiendo escalones

He subido a la Torre Tavira... 173 escalones.

Posteriormente subí a la Basílica de St. Peter en el Vaticano, y aunque cogimos el ascensor hasta la azotea, los últimos 320 escalones a la cúpula hay que hacerlos a patita sí o sí.

En París no cuento los de la Torre Eiffel porque no los subí, cogimos el ascensor, los peldaños los dejamos para esos que no quieren rascarse el bolsillo un par de euros más o quieren ejercitar los gemelos, gracias...

Pero sí subimos a Notre Dame, con sus 387 escalones.

En Edimburgo disfrutamos de las vista del Scott's Monumet y sus 287 escalones.

No contentos con ello, fuimos al Monumento de William Wallace en Stirling y nos comimos 246 escaloncitos de nada.

En Brujas me dejé la lengua, los pulmones, los gemelos, las rodillas y parte de los muslos subiendo aquellos 366 escalones del infierno... y me juré no volver a subir ni una puñetera torre más.

Pero fue llegar a Copenague y saber que no podía marchar sin subir los 400 escalones que te llevan a la cúpula. Y como los 150 últimos están fuera de la torre, ni se notan. De hecho, no me molesté en leer el número de escalones a subir y fue solo al bajar mientras comía en un restaurante que leí el número. Si me lo dicen antes, probablemente ni lo habría intentado y me habría perdido vistas increibles.
subí a otra torre, la Round Tower pero esta no cuenta porque no tiene escalones, es todo una rampa circular que tampoco cuenta como no lo hace la Giralda con las suyas, a donde también he subido.

He subido otras torres. Ninguna con tantos escalones. La Torre Tavira es un escupitajo comparado con estas otras. Y aunque me juro, rejuro y repito y me comprometo a no volver a ponerme en esa tesitura de nuvo, nunca lo cumplo. La posibilidad de unas vistas espectaculares me pueden más.





miércoles, 16 de septiembre de 2015

Ripley 's believe it or not! (Copenague, II)

Imagino que recordáis un program de televisión llamado Ripley's Believe it or not! donde en cada episodio se nos traían etrañas historias .
Originariamente fue una franquicia que se extendió a la radio, televisión e incluso al mundo del cómic...

Ripley expuso por primera su colección de artefactos, papeles, etc al público durante la Feria Mundial en Chicago en 1933, atrayendo a más de dos millones de visitantes. Este éxito sin precedentes llevó a organizar shows en caravanas a lo largo del país durante los años treinta, y las colecciones  de Ripley se exibieron en las principales ferias y exposiciones incluyendo San Francisco, Dallas, Cleveland, San diego, Nueva York,  y St Agustine en Florida.

Luego llegaron los museos, con 32 alrededor del mundo. En Europa, la franquicia tiene sedes en Copenague, Londres y Blackpool solo. Había un tercero en UK pero cerró en 1997. Así que me decidí a visitar el de Copenague ya que al de Londres no he ido.


Iba a sabiendas de que posiblemente iba a tirar unos 10e a la basura y de que me iba a encontrar la mayor cantidad de basura en una galería que vería en la vida, pero lo confieso: la curiosidad no pudo, y si uno no se da un capricho aún a sabiendas de que no merece la pena... ¿para qué están las vacaciones?

Así que veamos, a destacar, las chorradas que nos encontramos...


Sí, es exactamente lo que parece...


Arriba, maniquí de Robert Earl Hugues, nacido en 1926 pesand onada más y nada menos que cinco kilos. No quiero ni pensar cómo le dejó aquello a su madre, pero no creo que recuperase su forma original... 
Con tres meses, durante un ataque de tos convulsa, le explotó una glándula en la garganta y desde aquel día y durante el resto de su vida ganó varios kilos a diario. Con 20 años usaba petos con una cinturilla de 275 centímetros y su madre le tenía que añadir paneles de 40 centímetros a sus camisas de la talla 48 (una 20 española), para cubrir su pecho de 255 centímetros. 
Robert murió en 1958 a los 32 años, pesando 481 kgs. 


La mujer más fea del mundo se llamaba Grace y una vez se quejó de un publicista un poco entusiasta que la llamó "la mujer más fea del mundo". Pero cuando reveló su rostro en el espectáculo en el que participaba, hombres y mujeres por igual se desmayaban del susto. La apodaban "La mujer con cara de mula", pero de hecho recibió varias propuestas de matrimonio... 



Sé que mi amigo Chema va a decir que descubrió a los jívaros en algún tebeo de Mortadelo o Zipi y Zape, quizá hasta le inspire para escribir un post al respecto, XD. 
El cartelito del exposito donde estaban estas cabezas reducidas aseguraba que eran cabezas reales y no ningún maniquí. Tararí.


Una trucha con pelo


El artista que ha decorado el murciélago superior también tenía expuestas mariposas, escarabajos y otros insectos y animales decorados con escenas diversas.


Avlino Peres Matos, cubano él, podía dislocarse los ojos fuera de sus cuencas cuando le daba la gana!


Una mujer de Padaung en Burma con un cuello de 38cm. Solo paran de añadir collares tras cumplir 25 años.


Definición típica de bocachancla...


Y este señor se hizo "famoso" por tener dos pupilas en cada ojo.

El museo tiene también maquetas hechas con palillos o palitos de jelados, animales con dos cabezas, deformes o varias patas,  y una colección de "seres raros" como los superiores.

Una chorrada entretenida mejor para ver acompañado!



martes, 8 de septiembre de 2015

Copenague (I)

Este año mi primera parte de las vacaciones ha sido en la ciudad danesa de Copenhaguen. La ciudad de los canales limpios, cuyas aguas son comprobadas con asiduidad para conservar su pureza, donde en verano sus habitantes se bañan en esos canales; la ciudad de las bicicletas (dos por cada habitante), la ciudad de La Sirenita.

Mi primer día comenzó con un calorcillo agradable que luego derivó en llovizna durante un ratillo, no mucho. El sol sale y se va en Copenague con la misma velocidad que las bicicletas corren por las carreteras y sus carriles designados.

Primer parada: La Sirenita, el Kastellet y paseo por Nyhavn y sus casitas de ensueño a la vera del canal.




A unos 75 metros de la famosa Sirenita, se encuentra su hermana mayor. Al parecer la escultura era propiedad de un restaurante frente a la bahía, pero ahora mismo está chapado.



Y no mucho más lejos se encuentra la Sirenita (genéticamente modificada). O lo que es lo mismo, el aspecto real que podría haber tenido la Sirenita tras probar pociones mágicas y embrujos para convertirse en humana.


Nyhavn:




martes, 1 de septiembre de 2015

Cortinas y cojín

En estos momentos vuelo a Copenague a pasar unos días de bien merecidas vacaciones. Pero os he dejado este post porque a mi vuelta, empanada con el "hype" de las vacaciones, voy a olvidarme de todo.

En fin, que de la creadora de "este zapatero lo arreglo yo en pun plis-plás, llega ahora "me ha sobrado un metro de tela que me da para una hoja de cortina, voy a comprar otro metrito". Y así la cosa, me he hecho unas cortinas nuevas para mi oficina, que tenía unas ene zul de delfines que tienen más años que Carracuca, aunque la verdad, la tela está bastante bien, motivo por el que la he guardado por si surgiera algún proyecto futuro o ventana que cubrir.



Y como me sobró del zapatero un retalito así cuadradito, pues me he hecho un cojín a juego, que esta tela de Santoro me trae loca y a mí la Gourjus de los coujons me aburre cansinamente, que la tiene la gente hasta en la sopa...