
Me dijo que no llorara, que las lágrimas me impedirían ver las estrellas, remedando imprecisamente al poeta y filósofo Rabindranath Tagore. Incluso me regaló una postal con la célebre frasecita escrita sobre los hombros de una vomitivamente empalagosa pareja.
-No estoy llorando -le dije-. Me molestan las putas lentillas.
La postal aún anda entre las otras, en mi caja azul de ColaCao. De él apenas recuerdo el nombre.
Candelucha.... quiero másm ,más, más....plis
ResponderEliminaryo tambien tengo una caja azul de los recuerdos. La mia no huele a colacao, jeje. BEsos
ResponderEliminarjajaja, pues sí, la frasecita es un poco cursi, y el lagrimeo de tus ojos tenía una explicación más prosaica. ;) me he reído un montón con este mini-relato. :D
ResponderEliminar¿Qué pasó con las postales y los libros de Tagore? ¿han caido en el olvido? ¿hemos crecido?
ResponderEliminarTagore era un petardo insoportable, nunca tendria un libro suyo. ¿Se puede ser mas cursi y que no le duela?
ResponderEliminarEstoy seguro de que Tagore, si levantara la cabeza, adoptaría ahora la frase que dijiste, a la del final me refiero ;)
ResponderEliminarTagore me acompañó desde los 15 a los 25 años. Hace poco tenía despistado el libro, por cierto.
ResponderEliminarYo también tengo algún recuerdo similar a esa postal de la que hablas, y la verdad es que no sé por qué conservo estas cosas....