jueves, 3 de enero de 2013

Meeting Adolf...

El día de Navidad bauticé a un gato. Y eso que no me gustan. Me encantan los perros, y en casa de la tía del guiri, ya hay uno, Albert, que me tomó "demasiado" cariño aquel día y tuve que detener sin paños calientes sus avances amorosos.
De nada me servía que me pusiera "ojitos"...


Adolf acaba de llegar a la familia y fue el regalo de Navidad de la primita del guiri (que ya tiene 13 años). Adolf tiene seis meses y aquel 25 de Diciembre aún no tenía nombre.

Una mirada a aquella cara peluda... Ese flequillo hacia el lado... ese bigotillo bajo la nariz... y el nombre me vino a los labios... ¡Coño, Adolf!


Lo más gracioso es que duerme con un "brazo" en alto. Nasío pa mandá...


Nunca un nombre tan poco agraciado le sentó mejor a un gato...


8 comentarios:

  1. ¡Ay, madre! ¿Sabes que a ese tipo de gatos se les llama "kitlers" y que existe una página web dedicada a ellos? Catsthatlooklikehitler.com , precisamente quería, vamos, quiero hablar de ello en un próximo post. Mira que ponerle Adolf a la criaturica...¡Ya te vale!
    Bss!

    ResponderEliminar
  2. Teniendo en cuenta que el perro se llama Albert, no lo veo tan mal, XDDD

    ResponderEliminar
  3. Yo le pondría Adolf a todos los gatos del mundo, y es que no me gustan mucho, son ariscos y "conveníos", como decimos por aquí. Ahora, Albert es una monada, para no resistirse a sus ojitos y darle mil achuchones. ¿Se nota que si me gustan los perros? jeje

    ResponderEliminar
  4. Entonces tu eres como yo, Merchi: no me gustan nada los gatos. De pequeñitos sí, cuando no miden ni un palmo. Luego me parecen lo mas arisco del mundo. A mi me gustan los perros

    ResponderEliminar
  5. Probre Albert que carita de pena tiene, y el gato, me encanta su mnombre, jajaja

    ResponderEliminar
  6. Jajaja, totalmente apropiado, de hecho, hace honor a él, por lo que se ve XDD

    ResponderEliminar
  7. XDDDD qué bueno el nombre. Ideal. Me parece el nombre de mascota más genial que he oído en años.

    ResponderEliminar

¡A ver qué me dices!