domingo, 8 de noviembre de 2020

De botella a lámpara

 A veces he tenido botellas preciosas en mis manos. De vino, de licores, de bebidas varias. Y al acabar su contenido, he tenido la duda de si tirarlas o guardarlas para poner una vela y dejar que la cera caiga hasta envolverla.

Normalmente, acaban en el contenedor de vidrio después de meses o incluso años cogiendo espacio en alacenas o botelleros.

En mi viaje a Viena hace ahora ya un par de años, regresé con un par de botellas de licores Mozart: una botella pequeña de Fresa y otra de Chocolate. De momento, hablemos de la fresa. Es pequeña, en la foto se puede ver su tamaño comparada con un bolígrafo...



Después de eliminar toda la etiqueta (con un nanax, tarea rápida efectuada en unos 10-15 minutos) y de limpiar bien la superfice, procedí a meter las lucecitas, que como podéis ver vienen con una imitación de corcho donde se encuentra el interruptor. 




Así ya solo quedaba encontrar una ubicación que para este tamaño tenía clara: la ventana del landing de la escalera. Lugar idóneo de paso bajando de las habitaciones superiores aún usando la tenue luz de las escaleras.




3 comentarios:

chema dijo...

qué chula! había una historieta de carpanta en la que veía que su amigo protasio se había hecho una lámpara con una botella, sólo que era con pantalla, la botella hacía de soporte. a carpanta le daba envidia y decidía hacerse una igual. para ello se compraba una botella de vino con la forma adecuada, y previamente se la bebía, cogiéndose una cogorza importante.
te ha quedado genial!

Bertha dijo...

Hola guapa como esta espero que muy bien, me encanta como tea que dado, muy chula, un beso.

Srta. Pepis dijo...

Pues me has inspirado, he hecho la mía propia con una vieja botella de licor de hierbas que guardaba para utilizar como aceitera... le he metido unas luces y a brillar! :D