sábado, 23 de mayo de 2015

Orgullosa de ser Paddy


Mi primer voto en Irlanda ha sido uno que me ha dado una satisfacción más que especial. No he votado por un partido político u otro, ni mi voto ha sido de protesta o indecisivo. Lo tuve bien claro desde el principio. Mi voto en el referendum para legalizar el matrimonio gay iba a ser un rotundo sí.

El colegio electoral está a la vuelta de la esquina. En principio había pactado con el guiri esperar a que llegara del trabajo a las 6pm para ir a votar. Las urnas abrían de 7am a 10pm, y teníamos tiempo de sobra, pero a mediodía yo no podía más de la impaciencia ¡era mi primer voto como Irlandesa! Me encontraba de baja laboral, por lo que no tenía que esperar horario alguno. Me vestí, cogí el pasaporte y mi tarjeta electoral y marché a cumplir mi deber de ciudadana.

En comparación con el voto en Esapña, es muy diferente. En primer lugar, las mesas electorales están atendidas por voluntarios, nunca me van a llamar para una mesa. Y en segundo, a las diez, cuando cierran los colegios electorales, todos se van a casa, tras asegurar los votos. El recuento se deja para el día siguiente.
En esta ocasión (no sé en las elecciones) no había "confesionarios" con cortinillas y papeletas. Las papeletas te las daban en mano al comprobar tu nombre en la lista y tu identidad. Me entregaron dos papeletas porque era un doble referendum: por una parte el del matrimonio; la segunda papeleta era para cambiar la edad del Presidente, que hoy por hoy es de 35 años, a 21. A esto voté que NO. ¿Os imagináis a uno de los Jedwards en la presidencia, votado por sus fanes más acérrimos...? Ni de coña.

Me siento parte de un momento histórico, haber podido contribuir no solo con mis impuestos al desarrollo de este país, también con mis ideales, y que mi voto haya de alguna manera contribuido a este rotundo éxito. Hoy, hay celebraciones por todo Cork, por todo el país.

Muchos me han preguntado por qué en Irlanda nos han dado la oportunidad de votar por ello y, apoyando todos los partidos el Sí, no lo han pasado directamente en el gobierno. La respuesta es sencilla: por ley, la Constitución solo se puede cambiar con el permiso de los ciudadanos por medio de referendum. De este modo, se evita que el partido en el poder altere la Constitución siempre que le venga en gana. 

Pero además es otra victoria, la victoria sobre el poder que ha ejercido la iglesia católica sobre el país, haciendo y deshaciendo a su antojo en ciertas cuestiones. El matrimonio no es un privilegio de heterosexuales. Y este referendum solicitaba IGUALDAD. 

En Irlanda, la homosexualidad era ilegal y estaba penalizada con cárcel hasta no hace mucho, 1993. O lo que es lo mismo, 4 años antes de mi llegada al país, por lo que es historia bien reciente. Y el divorcio no se legalizó hasta 1995.

Oscar Wilde, espero que estés orgulloso de este paso dado, aunque llegue con siglos de retraso.

domingo, 17 de mayo de 2015

Descubriendo cómics

Fue a principios de la semana pasada que Lew Stringer, dibujante de la revista Beano y a quien conozco a través de un foro de cómics y Facebook, subió a su blog uno de los anuales de su estantería. Lew no conocía a los autores de ls historietas que aparecen en este anual de 62 páginas, solo que eran de procedencia española. El me escubrió el anual, y yo a sus autores, que no son precisamente desconocidos en España.

La portada en sí ya da una pista: historietas de Zipi y Zape y la Familia Cebolleta, pero este tesorito de 1984 trae algunos descubrimientos importantes.



My Cartoon Annual 1984 fue publicado por Opal Quill Ltd., una editorial británica que duró muy poquito y que publicaba anuales británicos, algunos de los cuales fueron historietas españolas traducidas, aunque esta parece ser el único que contiene historieras de Zipi y Zape, Mortadelo y Filemón y otros clásicos de nuestros tebeos. Opal Quill Ltd. se mantuvo en el mercado desde más o menos 1982 hasta 1986, cuando cesó toda actividad. El anual aparece como Impreso en España por Grijelme en Bilbao, todo un referente del mundo gráfico. 

Como ya he adelantado, contiene algunas historietas clásicas y otras tantas que no esperaba hubieran tenido ningún tipo de envergadura internacional. Así, por ejemplo, entre los cómics populares en Espa­ña en los setenta y ochenta, podemos encontrar aventuras de la Familia Cebolleta, que en este Anual fueron bautizados como The Chumms y de las cuales publican un total de 14 historietas de una página.


A continuación, una aventura completa de 6 páginas de Mortadelo y Filemón, y aquí viene una de las curiosidades del tomito: si bien todos tenemos constancia de los nombres dados a estos dos personajes en toda Europa, siendo los más conocidos Mort & Phil en UK o Clever and Smart en Alemania, la República Checa o Noruega y Flip & Flop en Dinamarca, en esta ocasión los personajes aparecen como el típico plato de salchichas con puré de patatas: Banger & Mash.


Le sigue una aventura de una sola página de Flash el Fotógrafo, de Raf. Un personaje que no recuerdo tuviera especial relevancia en el cómic de la época, aunque otros personajes de Raf sí la tuvieran y fueran mucho más conocidos.



Anacleto, Agente Secreto, también tiene cabida en este pequeño anual, bajo el nombre de Hambone - Secret Agent. Lo del hueso de jamón (Hambone) no lo pillo, la verdad. Trae una aventura de 4 páginas.


Pasamos a Swindle and Co. (Estafadores y Cía.), de Rojas (Arturo Rojas de la Cámara), que en España no fueron otros que Don Percebe y Basilio.


El anual nos presenta también dos únicas páginas de dos autores muy diferentes pero que para mí tienen algo en común: estos dos personajes en particular no me gustaban nada y siempre pasaba la página. El primero es el Mini Rey (Tiny King aquí), de Joan March creado para las revistas Mortadelo y Super Mortadelo en el 78, aunque seguramente apareció también en alguna otra publicación de Bruguera. 


El otro personaje que no me agrada nada pertenece a Alfonso Figueras y aquí le dieron por llamarlo Crazy Films. En España fue Cine Locuras: Guerra Loca. No soy una big fan, la verdad.


Una grata sorpresa es un cómic de Joan Nebot, Yolanda, para Mortadelo, pero que en años posteriores sería incluido como "historieta para chicas" en revistas como Lily o Esther.


Y de nuevo un cómic de Raf, Ben Bore, que no estoy segura de si es una aventura de Don Pelmazo llevada a isla desierta...


Y volvemos a los clásicos. Llegan los hermanos más traviesos de la historieta española: tres aventuras de Zipi y Zape (Zippy and Zappy).


Y por último, tres historietas del amigo Carpanta, a quien aquí se ha dado por llamar Justin Dustbin (Justin Basurero o Justin Cubo de Basura o tacho). Imagino que por su aspecto de mendigo.


La única crítica que tengo es la calidad de la edición, ya que las páginas no están cosidas y aún sin haberlo leído, releido y toqueteado, a estas alturas y tras haber pasado sus páginas no más de un par de veces para ver las historietas contenidas y realizar las fotos, ya hay sueltas más de una. Iremos sacando el pegamento...


domingo, 3 de mayo de 2015

Plantas

Este año me ha dado por las plantas. Y ha sido el peor año para hacerlo, porque a Pepper, le gustan mucho también... y ya he tenido algún que otro disgusto...



Así que me decidí a comprar cactus, aunque todo aquello que no pinche, es comestible para Pepper... pero he logrado una cierta estabilidad. Los que pinchan, al saló y la cocina, los que no, a la ventana de mi estudio.
Los que pinchan y además tienen flores muy apetecibles, a la estantería de mi estudio también, que esos son cactus-cactus y no necesitan ni mucha agua ni una luz superpotente. Así que vayamos con las presentaciones (sí, algunas de mis plantas, tienen nombre). No les hablo, todavía no, porque ya me las paso gritando "PEPPER!!!" cada vez que se acerca a una planta.

Pero os presento a mis niños verdes:

Esta es Leticia, una hermosa Aloe Vera que parece contenta -de momento- en su nueva ubicación sobre la repisa de la chimenea (chimenea que nos toca pintar y arreglr este verano porque ya véis el estado en que está, entre lo que ya tenía y lo que añadimos colgando cosas (guirnaldas de luces y esas cosas):


También en el salón tengo este magnífico cactus que compré en una tienda de Holanda:


Este par de cactuses están en la cocina y me los envió mi padre en el paquete de Navidades listos para plantar. Cinco meses después, y han sobrevivido...




Y estos tres cactuses los he comprado en Woodies (un DIY Store que me pilla detrás de casa y es que son tan monos que daba pena dejarlos alí. Cada vez que voy a comprar pintura, me traigo un par...


Estas tres macetitas también tienen plantas enviadas por mi padre. La menor de la derecha está seca y muerta remuerta, pero mi padre insiste en que la deje en paz que agarrará y le crecerán "hijos". Yo creo que no, pero tampoco me estorba ahí. Las otras plantas parece que han agarrado bien y siguen verdes y lozanas.


Estrella llegó desde Hoanda también, otra variedad de cactus no espinoso que se estaba ahogando en la escasa macetita en la que llegó, así que la he transplantado a su nueva casa, una maceta mucho más amplia y ahí se ha esparcido y abierto a sus anchas. 


Creo que esta se llama Cactus de navidad o algo así. Entró en casa con unas flores fucsia pero cayeron ya. Se supone que salen más a su debido tiempo pero en mi habitación se estaba marchitando y ahora está afuera en el patio, en el poyete de la ventana de la cocina. No sé si el clima húmedo y lluvioso de los últimos días acabará matándola, o el enorme caracol que encontré el viernes pegado a una de sus hojas. Tenía una planta como esta en la cocina que el anterior inquilino debió dejar y floreció durante dos veranos antes de morir con un color pocho y casi gris. No sé qué les pasa...


Estas dos las compré en una tienda de plantas y cosasa electrónicas (sí, en la misma tienda dos cosas tan dispares), pero las florecilles verdes de la derecha, como véis, no parecen estar muy bien en su nuevo terrario. Las de la izquierda han desarrollado un color verde muy lozano, pero la siguiente foto os mostrará su color/estado anterior, justo cuando las compré...


Arriba, ahora. Abajo, el día que las compré. Mi padre dice que el color de la verde de la izquierda varía según se tenga la planta dentro o fuera de la casa, y que eso va a gusto personal. Voy a comprar un par de plantas más como la de la derecha y dejarlas fuera esta vez, a ver si esas se ponen más contentas. De todos modos igual es porque al principio las tenía en mi estudio sobre la estantería al fondo de la habitación y solo les llegaba luz indirecta. Ahora están en plena ventana donde reciben sol y luz desde el amanecer hasta bien entradísima la tarde.


Y estos son mis últimos vicios, sí. Si alguien tiene conocimientos de horticultura -mi padre es un experto, pero la distancia es lo que tiene, y encima su móvil es básico, porque ya les vale que no saben enviar un mensaje de texto, mucho menso manejar una cámara desde un teléfono o abrir fotos...