No sé si soy la única o si le sucede a más gente. Odio los Domingos con saña. Antes eran sinónimos de dormir hasta las tantas, pero eso ya lo hago los Sábados y algún que otro día a la semana si no tengo que trabajar. Además, me doy cuenta de que con los años, es cierto eso de que se duerme menos.
Yo siempre he sido una zángana, una marmota consagrada a las sábanas. En casa, cuando vivía con mis padres, me tenía que despertar mi madre porque siempre le molestó el excesivo tiempo en la cama. Después, ya emancipada y con mi ex, no había descanso los sábados, y a veces ni los Domingos, hasta que le convencí tras muchas discusiones de que eso de ir a misa no estaba hecho para mí por más que él me obligase. Si, mi exquerido exesposo era un beato. De los convencidos, además, de esos de no predicar con la palabra sino con el puño.
Posteriormente, en mis tiempos de Au Pair, la madre de familia se sosprendía de que un Domingo pudiera dormir sin despertarme hasta las tres de la tarde. Bueno, lo de "sin despertarme" era un decir, porque entre la algarabía de los niños que a las 7am ya estaban dando por culo (en mi casa nunca nos dejaban levantarnos, como mínimo hasta las 10am y nada de hacer ruido, aunque no hacía falta, tanto mi hermana como yo éramos unas zánganas), y el repicar de las campanas de las iglesias cercanas (aquí las campanas repican a misa musicalmente a las 12 en punto, llueva, truene o haga sol), me despertaba varias veces, lo que contribuía a que alargase mi tiempo en la cama "un poquito más". A día de hoy las campanas no me inmutan, es más, creo que me despertaría alarmada si no las oigo. En realidad, ya no las oigo, me he acostumbrado tanto a su lejano tañir... pero mi primer Domingo aquí fue especialmente exitante: no sabía si repicaban a muerto o si era algún tipo de alarma, como en los pueblos medievales y estabamos a punto de ser atacados por vikingos.
En fin, a lo que iba. ¿Veis por qué odio los Domingos? Me vuelvo completamente espesa... el caso es que yo siempre he sido de dormir mucho. De llegar el fin de semana tras cinco días de trabajo y madrugones y ni siquiera ver la luz del sol porque me he metido en la cama a eso de las dos de la mañana y me he despertado a las cuatro o las cinco de la tarde, de nuevo de noche. Y ya desde hace unos años, mis horarios de encamada se han visto recortados poco a poco... y ahora, los Domingos, si he de trabajar el Lunes, no puedo estar en cama más de las once de la mañana, porque de lo contrario, no hay quien me haga dormir de noche... y el Lunes aparezco por la oficina con las pestañas a la altura de los tobillos y barriendo el suelo.
La razón, como digo, no es que sea el preludio de un lunes laboral. La verdad es que no suelo trabajar los lunes. Es pereza dominical incitada, tal vez, por el cambio de sonidos. Creo que la calle no suena igual, ni aquí, ni en Cádiz ni en ningún sitio. Me aburro un Domingo aunque esté de vacaciones tumbada en la playa. La prensa no es la misma. Los programas de televisión tampoco, pero esto me da igual porque apenas veo televisión.
Probablemente los Domingos, excepto leer el News of the World que solo se edita en este día, hago lo mismo de siempre: desayunar delante del ordenador (si desayuno), leer mi correo, algún blog, la prensa del día (Diario de Cádiz, El País, Irish Independent), y luego dedicarme a lo que sea (de mis hobbies, digo), pero no lo hago con la misma pasión, no dedico todo lo de mí que debería. Hago todo de manera cansina... por inercia... por puro aburrimiento.
Estos días estoy enfrascada en el montaje de la Revista Foroesther de Marzo, que verá la luz en un par de semanas... pero los Domingos no me sabe igual, mira tú por donde.
Eso sí, tenía pendiente subir aquí una foto que me recuerda a los Domingos con soniquete futbolero en mi Cádiz natal. No es el Cádiz, claro, no es el Trofeo Carranza que hace años que ni olemos, es algo mucho mejor, donde vamos a parar...!!
Es una foto de mi amigo y currante de la tele local de Cai, Eduardo, sosteniendo la Copa Mundial que estos días ha estado "de tour" por nuestras tierras. Y tiene ese sabor incomparable de Dominguitos de terracita a pie de playa, de pescaito frito y cerveza fresquita...
19 comentarios:
Lo que daría yo por un domingo durmiendo, con niños madrugadores es imposible....
Claro, por eso decia yo que los niños que tuve que cuidar de au pair estaban muy mal acostumbrados. En mi casa habia sopapo si osabamos perturbar el sueño de mis padres... y yo no tendre hijos, pero si los hubiera tenido, por mis santo ombligo que se quedan en cama... porque seguro que salen tan zanganos como su madre (yo creo que lo herede de mi tio, o me malacostumbré de verle hacer lo mismo... XDDD)
Mis niños saben que no pueden salir de la habitación antes de las 9, y a partir de esa hora se van a la sala encienden la tele y ni se entera uno de que están, ahora hasta se preparan el desayuno (tienen 7 y 12).... Pero odio los domingos, porque mi costillo se va, porque al día siguiente se trabaja, porque a veces toca visita familiar, etc...etc...
Ay Martmas, de eso tambien me libro yo!! Del coñazo de la familia!!! Los padres de Jay, de venir, vienen el Sabado a eso de la una, porque aprovechan para hacer compras (viven en un pueblo a media hora de Limerick), y siempre SIEMPRE llaman para decirlo el dia antes y media hora antes de llegar... porque yo ya pueden llamar al telefonillo, ya, que a no ser que no espere a alguien, no abro!! Me he hecho Irlandesa en ese tema...
Pasar los dos domingos en casa son horribles y eteeeeernos. Yo suelo aprovechar para alguna escapada con el novio por aquí cerca, pero si llueve ( que no son pocas veces... ) o si toca reunión familiar, psé...
Realmente ni se disfruta, ni ná de ná...
Pues a mí me gustan los domingos. Desayuno con tranquilidad y me vuelvo a la cama con algo que leer. Es un día en el que funciono despacio y aprovecho para desintoxicar mi cabeza del agobio de toda la semana.
Y a dormilona no me gana nadie. A mis 38 años puedo dormir hasta doce y catorce horas seguidas. Nací el día de la marmota :D
No es coña. Nací realmente el día de la marmota. Y ahora que lo pienso... ¿qué hago despierta a estas horas? ¡¡A LA CAMA INMEDIATAMENTE!!
Hola Candela... paisana??
bueno, curiseando he visto, tu blog y siguiendo con el curioseo me entero q ademas de dormilona eres de cadiz??
pues nada, solo un saludito y tranki, ya es LUNESSSSS.
Ya me pasare de vez en cuando, porque yo dormilona.. ya no mucho, pero entrometia....ademas me gusta tu blog.
Saludos desde la tacita.
Para mí tiene un tono agridulce que no me gusta. Básicamente porque me da la sensación de que el fin de semana se me escapa de las manos. Significa que al día siguiente toca volver al trabajo y con esa idea en la cabeza no se disfruta igual.
Aunque hubo un tiempo en que los adoraba porque era mi único día de descanso semanal.
En cuanto a las horas de sueño, jamás he sido capaz de dormir tanto, ni de niña. Mi hora límite eran las 11-12 de la mañana, y ahora me caigo de la cama a las 9:00 (sin niños ni despertadores que incordien), snif.
jajjaa, gracias Angela, y bienvenida! Pasate por aqui cuando quieras, sin problemas!! Si que soy de Cadiz, si, aunque afingada en guirilandia desde hace siglos...
los domingos yo también soy perezoso, no les veo ninguna motivación en especial. es raro que salga a la calle un domingo por la mañana, a comprar un libro o alguna cosa así, pudiendo haberlo hecho el sábado...
últimamente me levanto pronto siempre, aunque haya dormido poco la noche anterior o aunque haya salido. entre las seis y siete de la mañana me despierto y después estoy durmiéndome y despertándome a intervalos cortos, con un sueño poco reparador, hasta que al final me harto y acabo levantándome.
En España el domingo era cuando más bolos tenía... aqui en América a veces es como un día mas... vamos que no sé ni en que día vivo!!!
Feliz Lunes ;D
A mí si me gustan los domingos (los que libro) porque: es el día que puedo desayunar con total tranquilidad sin que me metan prisas. También puedo estar en el sofá toda la mañana delante de la tele en estado de semialetargamiento. Si el cuerpo nos pide vidilla, nos damos una vuelta por la plaza de Santa Ana mi chico y yo, nos tomamos unas cañas, disfrutando del aperitivo. Cuando coincido con la gente, está relajadita, y las siestas después de la comida del domingo son espectaculares. (Lo que no me gusta ya son las noches de domingo, son admonitorias, al día siguente fijo fijo hay que currar... ajs.)
En fin, que tengas un inicio de semana genial. Un besote muy gordo!
El Domingo para mi.. fantástico, la continuación del Sábado, me levanto temprano, aunque no tanto como a diario, vamos a desayunar a la calle, rastrillo, o campo, o playa... ya por la tarde va entrando la pena y los suspiros del odioso Lunes
besos
No sé,cariño. Yo, el domingo, me levanto a las 7 y me limpio la casa, o hago la comida para la semana, o me pongo al día con las noticias, o... me pongo a follar.
Todo menos dormir.
Y, lo peor, he sido así siempre.
Besitossss.
Limpiar un domingo, alter ego??? Antes muerta y sucia... Lo de follar a rajatabla, no hay nada como un kiki dominguero, pero después de eso... ¡me da pereza todo!
Los oooodioooo. pero es que los odio profundamente, exactamente por el mismo motivo que ha expuesto Anele, ese tono agridulce que tiene el domingo me infunde tal pereza, tal aburrimiento qu ees que todo me resulta cansino, monótono... no sé, me entra tal desmotivación que no me apetece hacer nada.
¡Golfo! Cuanto tiempo sin leerte por aquí!
Pues ves? a mí me encantan, pq como curro tb en invierno los sábados a la mañana, el levantarme aunque sea pronto por el peque y no tener esa obligación... mmm fantástico!!
Niña, yo soy de las tuyas...el domingo siempre tiene un aire depresivo que no me gusta ni una mijita!!! :P
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