viernes, 24 de abril de 2015

I'm a Plastic Paddy...

Después de recibir la nacionalidad y convertirme en ciudadana irlandesa, quedaba otro trámite, uno que fui olvidando y que no permitía más demora si quería estar registrada a tiempo en el censo electoral y poder votar al referendum para el matrimonio gay en Irlanda: me quedaba hacerme el pasaporte y vuelta a recopilar papelitos:

  • 4 fotos nuevas y en blanco y negro, dos de las cuales han de estar firmadas y selladas por la Gardai (la policía irlandesa)
  • el formulario de solicitud del pasaporte, que hay que llevar una parte a que te la rellena la gardai también para certificar que tú eres la persona que lo solicita.
  • el certificado de naturalización
  • certificado de nacimiento literal y al no ser plurilingüe, su traducción jurada
  • el pasaporte original español
  • prueba de tu identidad (que puede ser una nómina, un extracto bancario, el registro universitario...
  • prueba de dirección (alguna factura, cartas del tax office, documentación oficial
Con todo esto puedes solicitar el pasaporte de dos maneras: yendo a la oficina de pasaportes con cita previa y pagando 95e en el mostrador o bien en la oficina de correos donde pagas 89. Yo, que lo tenía bastante claro en cuanto a la documentación y me las prometía bien felices, elegí hacerlo en correos, no por ahorrarme 6 euros sino porque correos abre los Sábados, yo trabajo de lunes a viernes y la oficina cierra a la misma hora que yo acabo de currar, más o menos.

Cuando entregas todo en correos, te dan un justificante de pago con un número de seguimiento, con el cual puedes seguir los diferentes estados de tu solicitud en la página del Departamento de Foreign Affairs. Se supone que con al hacerlo por Correo, al ser Pasaporte Express, en dos semanas tienes tu documento y todos los papeleos enviados de vuelta en casa.

En mi caso, pasaron casi tres semanas antes de que se me ocurriese mirar el número de seguimiento y en unos días vi como ponían que me habían rechazado la solicitud. A las 48h me llegó una cartita a casa diciéndome que el certificado de nacimiento no era el original. Y claro, un crtificado, es un certificado, aquí y en Pekín y yo ya me imaginaba por dónde iban los tiros.

Mi primer error fue enviar un certificado que tenía en le cajón desde el año pasado (tenía varios) y el segundo, que en ningún sitio ponía que la traducción tuviera que ser original, así que les envié copia de la que usé para la nacionalización, imprimiéndola desde mi correo electrónico.

Cosnciente de que este podía ser el problema, ya que certificado solo hay uno (literal o extracto), mandé pedir al registro civil de nuevo una copia del extracto plurilingüe así como el literal, y a su llegada, lo envié a traducir. Con todo esto hecho, cogi cita en la oficina del Departamento de Foreign Affairs y entregué lo que faltaba. En menos de una semana, tachaaaaaaááán...


Ahora estoy lista para contribuir con algo más que mis impuestos a este país. Mi primer referendum es en menos de un mes, el 22 de Mayo, para votar un rotundo SÍ a la legalización del matrimonio gay.
Y para ello, cómo no, más papeleo. 
con el pasaporte en la mano, a rellenar ooootro formulario y llevarlo a que sellen la parte de atrás y la rellene un policía de nuevo, certificando mi identidad, para lo que tengo que estampar mi firma con él como testigo. Me ha mirado con cara rara al ver el pasaporte, proque ahora, oficialmente soy lo que llaman... A PLASTIC PADDY...


Siguiente parada... embajada. Pero para eso aún voy a esperar un par de meses...


2 comentarios:

chema dijo...

cuántos trámites, ahora te tienes que registrar como electora... bueno, ya eres irlandesa a todos los efectos, si te han dado el pasaporte es que la cosa va en serio.

Candela. dijo...

Hombre, el pasaporte me los tenían que dar sí o sí desde el momento que la Ministra de Justicia me aceptó como irlandesa... XD. Esto es como si en españa vas a renovarte el dni o el pasaporte y te dicen que no... pues no pueden!