sábado, 31 de mayo de 2008

A JIM CORR SE LE HA IDO LA PINZA


¿Que quién es Jim Corr? Jim era una persona que me caía muy bien, además de ser miembro de The Corrs, un grupo que me gusta bastante.
Sin embargo ayer me quedé de una pieza al escucharle en un programa de radio hablar sobre el Tratado de Lisboa y toda una teoría de conspiración relacionada con los ataques terroristas del 11 de Septiembre. O cómo perder el respeto por una persona en diez minutos.
Irlanda va a las urnas el próximo 12 de Junio para votar Sí o No al Tratado de Lisboa. Toda Europa esperando nuestra decisión. Por supuesto, como toda materia, el asunto tiene sus detractores y sus defensores. Caminando por cualquier calle, colgando de las farolas se pueden ver posters : VOTA SI. VOTA NO.
Hasta aquí todos de acuerdo. Qué sería de nosotros de lo contrario, pobres idiotas aceptando lo que se nos venga encima sin rechistar.
Y Jim Corr está en contra del Tratado, por lo que pide el No en las urnas. Hasta aquí todo normal también, en su derecho está. Lo que no está bien es toda esta teoría que le ha convertido en objeto de tanta polémica, y con razón:
Según el guitarrista, existe una abrumadora cantidad de evidencia de que los ataques del 11 de Septiembre en América fueron llevados a cabo por miembros de la administración de George Bush y los Servicios Secretos, como manifestó en una controvertida entrevista en la emisora de radio TodayFm, donde también hablo en contra del Tratado del que dijo que no es más que una "aproximación de puntillas del totalitarismo del Oeste europeo".
Jimmy asegura que hay que votar "No" a Lisboa porque podría introducir la pena de muerte en Irlanda y contribuir a una "órden de un nuevo mundo". Su oposición se basa en sus tres años "estudiando la Orden del Nuevo Mundo del que la Unión Europea es parte". Dice que "La UE está a un paso del gobierno mundial, se unirán con la Unión de Asia y el Pacífico, la Unión Africana y la Unión Norteamericana". El Tratado de Lisboa en sí mismo introducirá una "tecnocracia científica" en Europa que erosionará la soberanía nacional, y que la Tabla de Los Derechos Fundamentales permite la introducción de la pena de muerte. "Provee la introducción de leyes para la pena de muerte en tiempos de guerra o inminente peligro de guerra. Lo que estamos viendo es un totalitarismo conspicuo en el Oeste, donde el 11 de Septiembre fue la llave para comprender esto. Cuando se estudia el 11 de Septiembre, se convierte en algo muy evidente... fue un ataque terrorista preparado, lo que llaman una falsa operación bandera".
Segun Corr, esta "abrumadora" evidencia se puede hallar en un video "vetado en Tv" y que puede bajarse de Internet en Youtube, en el que se muestra la realidad de sus teorías. La entrevista, por Matt Cooper, puede escucharse en su totalidad pinchando aquí.
Po dió!

MUERTE DE UNA ARTISTA

Ha muerto Beryl Cook, una de mis artistas favoritas, tal vez porque su pintura no es nada convencional. Ha muerto quizá, tan discretamente como vivió, a los 81 años.

Para aquellos que no sepan mucho de esta magnífica autora, decir que Beryl nunca fue educada en el arte de pintar, y que solo empezó a hacerlo cuando le regaló a su hijo una caja de acuarelas y quiso enseñarle a usarlas.
En 1995 la Reina de Inglaterra le concedio un OBE (Order of the British Empire [Orden del Imperio Britanico]) por sus servicios al arte, y sus personajes, en su mayoría sobraditos de lorzas y muy, muy british, han sido utilizados en los sellos reales junto a Renoir y Rodin, pero la galería Tate, por ejemplo, nunca ha tenido uno de sus cuadros. Sin embargo algunas de sus pinturas pueden verse en el Museo de Arte Moderno de Glasgow, y no me cabe duda de que ahora con su muerte se disputarán sus obras, como suele ocurrir, por descgracia, con muchos artistas.

En su vida privada ha sido discreta y un tanto tímida, y aseguraba encontrar el material para su inspiración en sus numerosos viajes y estar influenciada por Stanley Spencer y Edward Burra. Este último pintaba principalmente escenas de cafés de dudosa reputación, prostitutas, marineros, bares gay, etc, pero Beryl por el contrario retrataba escenas alegres y elegantes, un reflejo de la alta sociedad con un tono de insolencia a veces y un mucho de sarcasmo.





Este artículo aparecido en The Telegraph es una perfecta visión de una mujer tan única como su obra.

Descanse en paz, Beryl Cook, 10/09/26 - 28/05/08.




viernes, 30 de mayo de 2008

A DONDE IREMOS A PARAR...

Levantarte con noticias de asesinatos, desastres naturales, accidentes en carretera, desolación y muerte no es grato para nadie. Cada día al comenzar a trabajar, oigo una de las emisoras nacionales, y justo a las nueve es el boletín de noticias.

El 2 de Septiembre del 2007 Patrick Coleman, de 33 años, fue apuñalado a pocos metros de su casa y falleció a consecuencia de las graves heridas. Hoy, un niño de 13 años (sí, no se me ha escapado el dedo, 13), ha sido acusado de su asesinato.

¿Tendremos que tener también miedo de los críos que se nos cruzan en la acera? Desconozco toda la historia, y me consta que Coleman residía en un barrio bajo (Southill), donde el 99% de la población está dedicada al crimen (digan lo que digan). Pero qué puede tener un niñato de 13 años en contra de un hombre de 33 para acuchillarle sin más en medio de la calle, a sangre fría, es algo que escapa mi razón de ser. Como me escapa el hecho de que este ser inhumano y malévolo (yo tengo un hijo así y lo ahogo en la bañera) salió de su casa con la idea de matar en la mente. Con un cuchillo en el bolsillo. O igual era habitual en él.

Ampliaré la noticia en cuanto tenga mas datos.

Desolador.


ACTUALIZACION

Segun la prensa local, parece ser que el acusado, que no puede ser nombrado por ser menor, no tenía 13 años sino 15 y ha sido acusado oficialmente del asesinato de Patrick Coleman en el Juzgado Local, después de ser arrestado ayer a las 7.17 de la mañana en su domicilio sin oponer resistencia. El acusado no mostró emoción alguna en los Juzgados al leerle los cargos.
Se le ha proporcionado ayuda legal gratuita y permanecerá bajo custodia en Trinity House en Dublín hasta la siguiente vista en el Juzgado de Menores el próximo 3 de Junio. La fianza ha sido dejada en manos del Tribunal Supremo.

jueves, 29 de mayo de 2008

LAS NORMAS DE UN HOGAR IRLANDES



  • Al Cabeza de Familia hay que dirigirse como "SEÑOR", "Su EXCELENCIA", "MYLORD", "MAESTRO", etc. Nunca como "Estúpido, hey tontorrón".
  • Los niños quejicas y las esposas regañonas no serán tolerados.
  • Las comidas han de servirse rápidamente. El Cabeza de Familia deberá ser servido primero (en la cama, si así lo requiere).
  • Los adolescentes y las féminas charlatanas limitarán las conversaciones telefónicas a 3 minutos. A cualquier otra hora, el teléfono debe dejarse descolgado.
  • Los deportes, las noticias y las películas del Oeste deben tener prioridad absoluta para ver en televisión.
  • El lavado de la ropa, cortado de césped y las conversaciones en voz alta no tendrán lugar durante el periodo de descanso del Cabeza de Familia.
  • Requerimientos de dinero, pagas, etc., sólo se tendrán en consideración por escrito en triplicado y debidamente notariado.
  • Tareas menores tales como fontanería, cortado de césped, pintar, labores domésticas, conducir, jardinería, ir de compras, etc., serán responsabilidad del Asistente del cabeza de Familia.
  • Los invitados son bienvenidos. De cualquier modo, si las invitaciones se extienden a pasar el fin de semana durante periodos de bebida, NO ERAN DE VERDAD SINCERAS.
  • Las "Reglas del Hogar" mencionadas anteriormente no reflejan necesariamente las opiniones de la dirección actual.

miércoles, 28 de mayo de 2008

SABOR A ANTIGUO

Encontré éste álbum de fotos en unos de mis lugares favoritos de búsqueda de libros curiosos y baratos: en el stand enfrente del supermercado Tesco en el Arthurs Quay Centre.
Me atrajo como una brillante flor atrae a una abeja. No huele a antiguo ni mucho menos, es una edición del 2006 pero no me pude resistir a comprarlo, porque éste no es un álbum de fotografías cualquiera. Es, como dice en su portada, La Historia de Nuestra Familia, y para ello no sólo hay espacio para colocar fotos de padres, tíos, abuelos, primos y hermanos, sino árboles genealógicos como el que se encuentra en la fotografía más abajo, pero además dividido por familias, es decir, la parte de la familia del padre y la de la madre. Digamos que la de la pareja que desee cumplimentar el álbum. Es entretenido y requiere muchos datos, eso sí, con fechas y lugares de nacimientos y defunciones.
El álbum viene separado en diferentes secciones con cómodos separadores y un bolsillo interior donde se guardan puntos adhesivos para las fotografías.
Entre las secciones que cuenta este original librito, está, La Tabla de Ancestros del esposo, seguido de la de la esposa; la familia inmediata del marido, la de su mujer; educación, dedicación y hogares (esto comprende escuelas, institutos y universidades; calificaciones, premios y titulaciones, y fechas de escolarización y direcciones en las que se ha vivido).


A continuación hay una sección dedicada a celebraciones y reuniones familiares, otra a las actividades favoritas y vacacionales, y por último una dedicada a los amigos y las mascotas de la familia, lo cual me ha parecido de lo más curioso, al agrupar a amigos y animales en un mismo catálogo.
En cualquier caso, aunque desconozco muchos datos de mi genealogía y muchos más de la del guiri, que es harto complicada en cuanto a que su madre viene de Alemania, su abuela se separó de su abuelo en Inglaterra (él era alemán, soldado de las SS, prisionero de guerra en UK donde se conocieron), y algunos cabos aún andan sin atar.

Pero servirá para guardar las pocas fotos antiguas que poseo, esas de rostros dulces en sepia y miradas de un pasado decadente.

En cualquier caso, estoy muy contenta con mi adquisición, que por cierto, trae curiosas fotografías en su interior de personajes anónimos y aire firmemente británico, como las modelos de la foto de la derecha.

No sé si sería un bonito legado para esos hijos que no sé si algún día tendré, pero al menos podría resultar una actividad muy entretenida durante un buen número de meses, preguntando fechas, nombres, eventos y averiguando más datos sobre un pasado tan escurridizo como ese paso del tiempo que apergamina poco a poco lo más recóndito de nuestra memoria.

martes, 27 de mayo de 2008

LA TATA (El Rincón de LAR)

La Tata siempre fue rara. Rarísima. Había vivido en una casa al lado del cementerio antes de que la ingresaran en un hospital mental, donde moraría ya los últimos años de su vida entre Napoleones y Josefinas, añorando a su loro Pepe y sus numerosos gatos. Pero antes de todo esto, la Tata había vivido en un primer piso, en el casco antiguo, cerquita del Ayuntamiento, en una calle estrechita y con cuesta. Una casa con lúgubres historias donde nunca me sentí cómoda. No por la supuesta presencia de fantasmas o espíritus en babia, sino por la oscuridad del piso, los gatos, el loro insolente y el denso aroma del perfume agobiante que sólo soportan las señoras de cierta edad.

La Tata siempre fue mayor. Como Fred Astaire, siempre tuvo carita de vieja, con sus rizos negros y su nené en la frente a lo Estrellita Castro. En las fotos de boda de mis padres ya parece mayor, y cuando ella misma se casó, con un amigo exlegionario de mi abuelo, a mí me parecía una anciana. Siempre llevaba abrigo de piel, con estola y broche. Siempre llevaba joyas de las antiguas, aunque la Tata era madre soltera y solo había trabajado de mocita, precisamente en la casa donde se le empezó a hinchar la tripa hasta que la señora la echó a la calle. Crió a su hijo en aquel piso, y cuando el niño tenia seis o siete años, bajando a la carrera las empinadas y resbaladizas escaleras de piedra desgastada por el tiempo y los cepillos empapados en lejía, se cayó y perdió el conocimiento tras un golpe en la cabeza. Al despertar decía haber visto a niños atrapados en los escalones, asegurándole que todo iría bien y suplicándole que los sacara de allí. Pero el golpe no dejó más huella que ese sueño estremecedor.

Me contaron que muchos meses después, cuando hicieron obras para reparar las peligrosas escaleras, encontraron huesos humanos bajo la piedra deslucida. Ignoro si es cierto. Lo que sí es cierto es que la Tata, ya antes de vivir junto al cementerio, era dada a prácticas muy poco ortodoxas, como leer la mano y el futuro en las cartas.

También era aficionada a la práctica de ritos y magia blanca, siempre aconsejando colocar velas aquí o allí, pronunciar ciertas palabras "secretas" o mezclar remedios caseros y efectivas cataplasmas. A mi madre la ayudó a encontrar el lugar exacto donde se hallaba un anillo que había perdido hacía meses. Creo que el ritual consistía en repetir una palabra tres veces seguidas y colocar un vaso de agua con sal en la habitación donde se creía haber perdido el objeto. Tres días más tarde apareció el anillo, detrás de la cómoda, que mi madre se dispuso a retirar para limpiar a fondo. Casualidad, posiblemente. A mí me echó las cartas justo a mi regreso de Canarias, a donde pretendí ir a curarme del rechazo de una separación dolorosa, y de la cual no se le había dicho nada "para evitar la vergüenza". El caso es que empezó a hablarme de palmeras tropicales, de una isla y de una carta esperada con ansia (todo cierto). Me dijo que el futuro me deparaba otra isla. Naturalmente no la creí. La carta llegó en unos días. La isla poco más de un año después, en la que sigo.

Pero de todas las historias curiosas que rodean a la que concimos siempre como la Tata, la más escalofriante es la que se refiere a su relación con una de esas muñecas de porcelana y cartón piedra con las que creció mi madre. Contaba su vecina del segundo, que era ciega pero tenía el oido fino, que muchas veces la sorprendió sentada en su salita junto a la ventana del reyano, ajena a que podía ser vista, bueno, en el caso de Pacita, oida. Contaba la ciega que la oía hablar como con alguien, de esa manera con la que sólo se habla a los niños pequeños. La oía formular preguntas, y al pcoo, otra voz diferente, la suya, engolada, de ultratumba, responder. Pacita se santiguaba y continuaba su ascenso o descenso por las angostas escaleras. Creo que un día le preguntó sobre ello y mi Tata, del modo mas natural dijo que simplemente hablaba con la muñeca, una de esas muy parecidas a la Mariquita Perez original.

Esa muñeca perteneció a mi madre de pequeña, y muchos años más tarde, tras creerla perdida y destruida para siempre, la recuperó. Cuando se enteró de la historia oculta tras aquel rostro de porcelana pálido y ajado, a la que pensaba restaurar y comprar una peluca (sus hermosos bucles castaños habían sido cruelmente mutilados por su prima), la muñeca, Mariquita o no, fue exiliada al fondo del armario donde no sé si aún sigue.

A la Tata se la llevaron una noche de primavera a una institución, después de que llamara a la policía por enésima vez, convencida de que unos piratas gitanos estaban escalando el balcón para robarle todas sus joyas, pieles y objetos antiguos. El balcón de aquella casa cerquita del Ayuntamiento a la que tuvo que regresar cuando al morir su marido fue desahuciada de la casa al lado del cementerio porque los herederos del antiguo casero encontraron fallos y tecnicalidades en el supuesto documento de compra del inmueble.

Pero esa, quizá, es otra historia, y una muy, muy triste.


lunes, 26 de mayo de 2008

ANTES MUERTA QUE SIN SILLA


Yo no soy crítica literaria, pero soy una lectora con derecho a opinión. Y mi opinión es que hay gente que debe publicar porque realmente tiene algo que decir, no porque se quiera ser famoso/a, vivir de ello o darte pisto en tu nuevo estatus de "escritor". Simplemente porque se tiene algo que contar al mundo.
Y este es el caso de Antes Muerta Que Sin Silla, el librito de memorias y relatos de Barbarita Rubio. Me llegó hace apenas una semana y debido a problemas que no vienen a cuento, lo he tenido que leer a ratillos, pero hoy por fin lo he acabado. Barbarita, Barbie, tiene mucho que contar. Y cosas interesantes, también. Su libro me ha hecho reir y me ha hecho llorar casi a partes iguales, con una mezcla de humor cínico a veces y una pizca de acritud.
No puedo decir que conozco a Barbarita. Compartimos una misma afición: la muñeca Nancy. Y fue gracias a uno de estos foros de Nancys donde oí hablar por primera vez de su libro. Alguien me pasó entonces el link a su blog (gracias, Nuria) y su libro lo compré aquí. Y ha sido una compra totalmente acertada. El libro es más que ameno, y algunas de las entradas simplemente no tienen desperdicio. Como ésta, que espero no le importe que la publique, pero es corta y tajante y es un claro ejemplo del humor rápido y contundente de Barbarita:

—¿La silla también viaja? —me pregunta un taxista este mediodía cuando termino de subirme a su coche.
—¿A usted qué le parece? —le digo—, ¿cree que va a obrarse algún milagro durante el trayecto?

EL PSICOLOGO (El Rincón de Lar)


Debía tener yo 13 años. Era una mañana de Sábado, cuando me levantaba temprano para ver La Bola de Cristal y la película de corte juvenil que le seguía. La de esa mañana, aunque no sé el título, sí que la recordaré para el resto de mi vida. Trataba de una chica a la que le diagnostican un cáncer después de que su novio le encontrase un lunar extraño en la espalda. Nada impresionable, aunque muy triste porque creo que ella muere al final, pero nada que me dejara extremadamente marcada. Como cada Sábado, después de la sesión matinal de Tv tocaba ayudar en casa. Fregar lo primero. Y como en aquellos tiempos una llevaba la muñeca izquierda casi totalmente tomada por pulseras de modas varias (las que se hacían con el asa del tambor de detergente y con hilos de bordar hacías tu nombre... las de alambritos de colores enrollados... las de tubitos de plástico trenzado...), antes de fregar comenzaba el rito de quitármelas todas. Estaba en el proceso cuando de pronto me empecé a encontrar mal, todo empezó a darme vueltas y apenas pude caminar un metro y pronunciar un débil "mamá..." antes de desplomarme entre sus brazos. En mi semiinconsciencia la oía llamar mi nombre, pero aunque tenía los ojos abiertos, creo, no veía nada, todo era una nebulosa, la voz sonaba lejana... como en un sueño.


No tardé en recuperarme y volver en mí. Mi madre estaba, si cabe, más pálida que yo, así que llamó a un taxi y a mi padre para explicar lo ocurrido y acto seguido no tuvo mejor idea que meterme en un baño de agua fría, casi helada (esto ocurrió en temporada escolar y yo llevaba pijama, así que debia ser invierno). De ahí nos fuimos directas a urgencias, donde me hicieron un electroencefalograma, un análisis de sangre y un montón de preguntas. Una hora después me referían al psicólogo, con mi primera y única crisis nerviosa. Ya de vuelta en casa, me enviaron a la cama, desde donde podía oir los murmullos preocupados de mis padres, sopesando el tema, haciendo conjeturas. Llegué a pensar, al escuchar los sollozos de mi madre, pobre víctima, que, mientras a mí me ponían una veintena de electrodos en la cabeza, a mi madre le acababan de asegurar que padecía un tumor incurable. Me imaginaba tendida en una aséptica sala de hospital con el cráneo abierto y el cerebro a medio cortar. Creí que me quedaban meses de vida.


El lunes mi madre me recordó encarecidamente no decir a nadie que esa semana tenía cita con una psicóloga, o psiquiatra, o terapeuta o lo que fuese. Porque claro, las otras niñas iban a pensar que me faltaba un tornillo. Así que callé.

La doctora Forner no debía tener más de cuarenta años, el pelo corto a lo Salomé pero en rubio. Me hizo unas preguntas simples, enfrente de mi madre. Si tenía problemas en el colegio. Si tenía amigas. Si había algún tema que me preocupase. Qué leía. Qué películas eran mis favoritas. Luego me envió fuera de la sala y se quedó a solas con mi madre. Tras unos minutos me hicieron pasar de nuevo y esto fue lo que me dijo:


-"Tu mamá aquí me dice que eres una niña rebelde. Que no la quieres ayudar en casa y que coges rabietas. Que golpeas puertas y contestas mal."


Me quedé a cuadritos. Balbuceando -o como diría mi antigua profesora de lengua, balbuciendo-, traté de contestarle que aquello no era cierto, que yo protestaba por las excesivas tareas que me imponían hacer los Sábados y Domingos, en casa, pero nunca... yo... No me dejaron hablar.


-"A partir de hoy, cada vez que ayudes en las tareas de la casa tu mamá te dará un punto. Cuando tengas 10, te comprará un regalo. Veremos qué tal funciona y nos vemos de nuevo en un mes, ¿de acuerdo?" -Tras esto explicó a mi madre la importancia de incentivar el trabajo voluntario y premiar las respuestas positivas, y toda esa basura. Me sentí como un pingüino al que le darán su pececito tras completar sus trucos circenses.


Asentí como una tonta. En el corto trayecto desde el hospital a casa, mi madre aumentó los puntos a veinte y en lugar de ser un punto por cada actividad, sería un punto a la semana. Y me retiraría un punto si me portaba mal. Mi madre debió ser la profesora de la Supernanny. Fue ya en la cocina, en casa, que me atreví a preguntar por qué había dicho lo de golpear puertas y ser una chica difícil. Había dado la impresión de que yo era una cría de cinco años tirándose al suelo con rabietas, pataleando y golpeando el suelo y todo lo que estaba a su alcance con los puños. Y yo nunca había sido así.


-"Sí que lo eres. Yo a tu edad ya cocinaba y cosía y tú te pasas la vida leyendo cómics y escribiendo tonterías."

-"Mamá, pero tú a mi edad ya no ibas al colegio. Yo sí, y tengo deberes y obligaciones. Y yo te ayudo en casa."

-"Bueno, tenía que decirle algo a la psicóloga, ¿no? De lo contrario iba a pensar que estabas loca de verdad."


No creo que haya niña o adolescente que haga las labores domesticas con agrado, pero nosotros vivíamos en un piso con un salón que no usábamos, una salita, dos baños, la cocina y los dos dormitorios (el de mis padres y el que compartía con mi hermana). Cada Sábado me levantaba temprano, veía mi programa favorito y, a las doce cuando acababa, fregaba los cacharros de la noche anterior. Quitaba el polvo, barría y fregaba el suelo de la salita y barría y quitaba el polvo del salón en desuso. Hacía la cama de mis padres y la mía y limpiaba a fondo el cuarto de baño grande, que tenía bañera kilométrica, bidé, lavabo y water. Mientras tanto, mi hermana hacía la terraza, convertida en el cuarto de costura de mi madre, y el lavabo pequeño, además de barrer y limpiar el pasillo. Nuestro dormitorio lo hacíamos a medias, una barria, la otra limpiaba, yo quitaba el polvo a mis estanterías, ella a las suyas. Lo que dejaba a mi madre su dormitorio (excepto, como ya he dicho, hacer la cama), y la cocina. Naturalmente yo le había echado en cara esto a mi madre, acusándola de tener dos esclavas por hijas, lo que me trajo el calificativo de "rebelde" ante la psicóloga, título honorífico que aún ostento, he de decir, aunque ahora con más orgullo que vergüenza.

En cuanto a lo de golpear las puertas, mi madre se refería a las contadas ocasiones en las que me encerré en mi cuarto de un sonoro portazo, con un "déjame en paz", himno oficial de adolescentes cabreadas.

Ni qué decir tiene que tuve que ocultar el hecho de haber acudido a una psicóloga en clase, con mis amigas, bajo amenaza de convertirme en el hazmerreír de las de siempre, de aquellas a las que hoy se podía acusar de "mobbing" pero que ayer eran sólo las jefecillas del cotarro, las "chulas" de la clase. A esa edad nadie quiere ser una rechazada social, especialmente con mi historial y la seguridad, aún, de que debía tener un tumor muy malo en el cerebro.


Fue de casualidad, semanas después, que me percaté de que una de mis mejores amigas, Inma, no era la de siempre. Estaba triste, no hablaba mucho, había miedo en sus ojos. Tras unos minutos de presión, nos sentamos unas cuatro o cinco chicas en círculo en el patio.


-"Tengo una crisis nerviosa" -anunció-. "Me encontraba mal con el estómago, siempre estaba enferma y mi madre me llevó al médico, que dijo que era lo típico de la edad y me mandó a una psicóloga".

-"¿La doctora Forner?" -preguntó Mari Paz con los ojos como platos.

-"Sí".-contestó Inma.

-"Yo también. Se murió mi abuelo hace unas semanas" -dijo Mari Paz-. "Yo estaba muy triste y no tenía mucho apetito. Me enviaron a la psicóloga con crisis nerviosa".

-"Pues yo también" -confesé-. "Me desmayé un Sábado por la mañana. Mi madre no quería que lo dijera a nadie".

-"Ni la mía" -resopló Luisita-. "Me llevaron a una revisión para la vista, porque me dolían mucho los ojos y me daban migrañas. Como el oculista no me encontró nada, el de cabecera me mandó a la Forner".


Llegamos a la conclusión de que la misteriosa "crisis nerviosa" debía estar de moda aquel invierno y que la doctora Forner, o era la única psicóloga de Cádiz, o se estaba haciendo de oro a costa de un puñado de adolescentes experimentando cambios hormonales típicos de la edad.


Y así fue como, después del trauma de acudir a la psicóloga, sentí la necesidad, más que nunca, de ser tratada por un psiquiatra.

domingo, 25 de mayo de 2008

CUENTOS DE MI INFANCIA



Estos tres cuentos de arriba, formaron parte de una infancia donde el desarrollo de la imaginación venía de la mano de la lectura. Por desgracia me deshice de mis troquelados, aquellos maravillosos clásicos: Cenicienta, Caperucita, La bella Durmiente, y mi colección de cuentos ilustrados por María Pascual (no pierdo la esperanza, sé que los recuperaré aunque me deje el saldo en ello). Sin embargo, como muchas de mis "reliquias", siempre me fue imposible deshacerme de estos tesoros, anteriores a los troquelados, que ahora conforman otra buena parte de mis recuerdos. Las páginas de algunos se caen solas y uno de estos días los forraré definitivamente para tratar de controlar, en la medida de lo posible, el paso del tiempo.
Los dos primeros cuentos pertenecen a la colección Ramillete de Cuentos Infantiles. Ambos contienen textos de J. Aguilar de Serra con dibujos de Carlós, y se componen de varios relatos cortos (algún día los reproduciré aquí), tomando la portada el nombre del primero, pero son todos bellísimos.
También desconozco el año de publicación pero los editaba Ediciones Patrióticas, cuyo logo era un ágila con aura y una bandera en el pico. Por el tipo de dibujo, muy similares a los de la serie de Celia, imagino que deben ser de entre 1940 y 1960, aunque puedo estar del todo equivocada.
El tercer cuento, Labakan, el Falso Principe, es de la Coleccion Alfomba Mágica de la Editorial Molino, de 1965 y nuevamente son cuentos de corte Oriental, siempre con una temática aventurera pero inevitablemente moral, con ese sabor y ese feeling que sólo te dejan los cuentos clásicos, los de verdad. Y también huelen invitadoramente.

RELIGION Y RUGBY



Se puede decir que ayer fue un día completito. La primita del guiri hacía la Primera Comunión en su pueblo, en Charleville, y a las cinco jugaba la Copa Heineken el equipo regional de Rugby, Munster, cuyo color es el rojo pasión. La región de Munster comprente los condados de Cork, Limerick, Clare, Tipperary, Waterford y Kerry (o sea, todo el suroeste irlandés), y si los irlandeses de por sí ya son aficionados a cualquier excusa que les permita beber, cantar, gritar y divertirse, pues nada mejor que su gran pasión y obsesión: el rugby. Aunque aquí, a la hora de ser apasionados por cualquier deporte, no les falta material: el deporte nacional, Hurling; carreras de perros y caballos; fútbol (aunque poco porque el equipo nacional es una caca y el local prácticamente nulo).

Pero el deporte rey es sin duda el rugby, hasta la obsesión friki. Gracias a Dios el guiri no es fanático de ningún deporteen particular, si acaso el hurling y su adorado Manchester U, pero no en exceso. Quizá por eso a las cinco de la tarde era el único hombre que quedaba en la celebración de la Comunión, después de que el resto desapareciera en busca de un bar que restrasmitiese el partido.

De la Comunión, decir que abundaron los trajes rojos y blancos, sobre todo rojos (tal vez para apoyar a Munster). También había, claro está, el típico grupo de una comunidad muy extendida en Irlanda e Inglaterra, la de los Knackers, itenerants o Knackers. Aunque algunos les comparan con la omunidad gitana, no son Roma ni morenos de piel ni nada parecido. Algunos viven en caravanas a pesar de tener bastante dinero. Otros tienen lujosas casas. Sus gustos son exajerados. Suelen alquilar vistosas limusinas de color rosa o carruajes a lo Cenicienta para graduaciones y comuniones, y las novias se casan a lo merengue: faldas con cancanes de reinona, tiaras deslumbrantes (bling bling), y un vistoso surtido de vestidos de invitados que no dejan desperdicio a los comentarios más avispados.

Así, ayer me quedé con ganas de hacerles fotos como ejemplo, porque el grupo en cuestión estaba enfrente a menos de dos metros y no había modo de hacerlo conspicuamente. Sólo decir que había un vestido de licra color lavanda con cinturón plateado y zapatos de tacones de trapecio, lazos y broches, tan apretado (el vestido) que podías apreciar el ombligo de la panza incipiente de la portadora. Otra chica llevaba unos shorts blancos, camiseta de lentejuelas rojas y zapatos que podrían haber sido la envidia de cualquier Drag Queen. Por no hablar del traje rojo de raso con un broche enorme en el escote de una chica cuyo tetámen luchaba por no salirse del precario trozo de tela, a pesar de que el modelito no le sentaba bien. Era una chica jóven, de unos 16-17 años con demasiado peso para tan poco material. Claro que los knackers se caracterizan precisamente por el mal gusto al vestir y por el uso continuado y excesivo del bronceado en bote y las extensiones capilares, asi como los tops demasiado ajustados y cortos (sin importar el peso o la edad).



En fin, la comunión transcurrió sin mayor problema, la nena un angelito vestida de sencilla princesita.
Regresamos a Limerick justo cuando el clamor en la calle nos decía que Munster acababa de proclamarse campeón. Para tal evento, se habían instalado unas pantallas gigantes en pleno centro neurálgico de la ciudad, O'Connell Street, donde las tiendas y las ventanas de los edificios llevaban ya toda la semana engalanadas del más puro rojo. Banderas del equipo y cualquier prenda, camiseta o motivo del mismo color estaban en exposición en escaparates y vitrinas. Hay una selección maravillosa de fotos de Pily aqui (con tu permiso, cuate, espero no te importe pero llegué demasiado tarde para hacer de fotógrafo). Habían cortado O'Connell justo desde la confluencia de mi calle. No dejaban pasar ni a peatones por la acera. Macizos Gardas (la policía nacional irlandesa) flanqueaban como cancerberos la barricada. Y yo quería una foto de la masa efervescente vestida de un color que solía ser mi favorito (no por nada, a veces me gustan más otros colores, y que queréis que os diga, el rojo engorda). Ante la mirada sorprendida del guiri, con mis tacones rojos (me hacían juego con las flores del vestido negro que llevaba, no porque jugara el equipo, que conste), me acerqué al jovencísimo e imposiblemente alto policía que custodiaba la acera y con toda la convicción que pude sacar (tono autoritario incluído, eso es esencial) y ofreciéndole una cálida pero segura sonrisa le dije:

-"Soy una periodista española y me gustaría hacer una foto de la muchedumbre, será sólo un segundo". Naturalmente esperaba que demandara el visionado de algún tipo de credencial, o simplemente que me enviase de vuelta por el mismo camino que había llegado. Estaba dispuesta a mostrarle mi carnet de identidad... por si colaba, ya que mis viejas credenciales desaparecieron la primera vez que me robaron el bolso.

-"Ok" -me contestó, abriendo unas puertas denegadas a otros curiosos con cámaras más pequeñas que la mía. Luego dicen que el tamaño no importa, pero en mi caso creo que la Nikon de aspecto profesional ayudó bastante. Y éste es el resultado:






Dentro de breves momentos llegará a Limerick el autobús descubierto que traerá de vuelta al equipo vencedor, que será de nuevo aclamado en todo su esplendor en O'Connell Street, cortada otra vez al tráfico hasta el final del día. Gracais a Dios no tengo que salir a comprar nada hoy, porque esto me jode bastante, todo el centro acordonado como la escena de un crímen. Tampoco voy a ir a recibir a los vencedores, porque he alquilado Sweeney Todd que me parece mucho más interesante que una panda de gigantes calvos con la nariz rota y el cerebro hueco. Por no hablar del estado ebrio de los espectadores, cosa que ya de por sí me quita las ganas hasta de ir a la esquina a por tabaco (como tampoco fumo, no hay problema).

La calle, ayer al menos, a altas horas ya de la noche, era difícil de frecuentar. Los exaltados fans del rugby habían estado bebiendo todo el día y algunos yacían al borde del coma etílico en medio de las aceras, mientras tratabas de esquivar a los que iban barriendo la misma, chicas jóvenes y mujeres en especial, tambaleándose peligrosamente sobre tacones de aguja y a duras penas sosteniendo los ojos abiertos.

Es la dura realidad de un fin de semana festivo hasta el límite. Pero, ¿y lo que se reirán el lunes...?

jueves, 22 de mayo de 2008

ENTREGA PREMIOS II SALON INTERNACIONAL COMIC DE HUELVA

Los premiados



Despidiéndose del público amante del cómic hasta el próximo año, el Salón del Cómic, en colaboración con Ayuntamiento de Huelva y la Asociación Cultural Seis Viñetas en una iniciativa nacida desde Seis Viñetas para hacer llegar a los onubenses el noveno arte, ya que el cómic además de cultura visual y leída es una forma sana de ocio, no quiso irse sin antes entregar unos bien merecidos premios. Pilar Miranda y Juani Carrillo, concejalas de Juventud y Participacion Ciudadana respectivamente y Gerardo Macias, presidente de la Asociacion Cultural Seis Viñetas fueron los encargados de otorgar los trofeos en sus diferentes modalidades.


Afluencia de Publico en el Salón

Así, en la categoría profesional, recibieron los Chocos Honorificos la autora Purita Campos (Esther y su Mundo), Lopez Espí (conocido por sus portadas para la edición española de los Cómics Marvel), Francisco Ortega (dibujante), Nihon Yosai (Asociación Juvenil que colabora con el Salón), y Alberto García "Algar" (fundador de la Asociación Cultural Seis Viñetas). Estos premios fueron entregados el pasado sábado 17 a mediodía, mientras el Domingo 18 se procedía a premiar los diversos concursos (de ilustración, campeonato Mario Kart, karaoke, torneo gomaespuma, liga softcombat, y el concurso Cosplay) realizados a lo largo del Salón y donados por los diferentes stands, con premios que iban desde vales monetarios a chapas y posters, mientras la editorial Castilla Reno sorteó El Quijote yla Historia de Andalucía en Cómic, dos obras valoradas en más de 350euros cada una.


Gerardo Macías

miércoles, 21 de mayo de 2008

LA FILOSOFIA DE UN IRLANDES


Hay dos cosas de las cuales preocuparse, si estas bien o si estas enfermo.
Si estas bien, no hay nada de lo que preocuparse.
Pero si estas enfermo, hay dos cosas de las que preocuparse,
si te pondras bien o si te moriras.
Si te pones bien, no hay nada de lo que preocuparse.

Pero si mueres, solo hay dos cosas de las que preocuparse,
si iras a l cielo o al infierno.
Si vas al cielo no hay nada de lo que preocuparse.

Pero si vas al infierno, estaras tan ocupado dando apretones de manos a tus amigos que no tendras tiempo de prreocuparte!

¿PARA QUE PREOCUPARSE?
Así, con este tipo de filosofía, no me extraña nada lo que estoy oyendo en la radio en este momento y desde hace una par de horas, respecto a la no clasificación de Irlanda para la final de Eurovisión. Para ser vulgar y llamar a las cosas por su nombre, el carácter irlandés no les permite oler su propia mierda, y de este modo desde anoche están rascándose el cogote pensando por qué no han triunfado, ignorando en todo momento el hecho de que se les abucheó justo al salir a escena y se les seguía abucheando al concluir lo que ni siquiera puede calificarse de "actuación". Se consuelan diciendo que simplemente "Europa no lo ha pillado". Que no se ha sabido leer el mensaje y no han comprendido el sentido de humor franco y abierto de los irlandeses, que se les ha dejado fuera injustamente.
Me parece que también seremos abucheados el Sábado (los españoles, digo), aunque nosostros no nos rascaremos el cogote, no. Seremos autocríticos al máximo y culparemos a la madre que parió al cordero y a los cuatro idiotas que decidieron enviar a Chikilicuatre a representarnos a esta autopsia llamada Eurovisión. Nos rasgaremos las vestiduras y lapidaremos al que no tiene culpa, mientras todo este rato hemos cantado la canción hasta la saciedad en ferias, bodorrios y hasta, cómo no, en privado, quizá hasta ensayando el cruzaíto.
Porca vida.

martes, 20 de mayo de 2008

EL HOMBRE GRIS


El Hombre Gris, más que una leyenda, es una superstición de cómo nuestros antepasados interpretaban hechos naturales, ya que el Hombre Gris no es más que una masa grisácea de niebla espesa. Podría venir de una antiguo dios Celta, tal vez de la tormenta o el tiempo, al que se adoraba en las comunidades costeras allá por el 1500 ac., y es uno de los más misteriosos pues poco se sabe de él en cuanto a en qué categoría de hada clasificarlo, y su origen es incierto. En otras partes del país se le conoce como "El Viejo Sin Huesos", al ser informe e inconsistente, más una sombra que un cuerpo sólido.
Vive principalmente en las zonas costeras y en las pantanosas, y se presenta, como ya dijera, en forma de niebla espesa que lo cubre todo, es ese tipo de niebla que no nos permite ver más que a unos pocos centímetros de distancia. Como en todo lo referente a folclore, su aspecto es descrito de manera diferente en distintas zonas del país. Unos le describen como una niebla vaga, a jirones casi. Otros aseguran que tiene el tamaño de un hombre vestido en una capa gris hecha de una densa niebla que agita constantemente, envolviendo todo a su paso. En otras partes del mapa es un gigante encapuchado vestido como un monje con tejidos brumosos.
Parece ser que se alimenta del humo de las chimeneas de las casas, por lo que este ser no tiene ningún problema, a diferencia con otras razas sobrenaturales, en acercarse a grandes ciudades.
Cuando pasa, deja tras de sí un desagradable olor a humedad , a madera quemada o a turba, y el aire se vuelve frío y húmedo.
Su capa de bruma tiene un efecto letal en sus víctimas, y parece regocijarse en la pérdida de vidas humanas. su único propósito parece ser el de acabar con la vida de marineros y viajeros despistados. Su pasatiempo favorito es oscurecer la línea de la costa, las rocas peligrosas contra las que se estrellaran navíos desconocedores de la zona, o esparcirá su manto en la carretera o el camino del viajero para que se pierda en los bosques o se precipite por un barranco.

Tampoco se está a salvo de su poder en en interior del hogar, a donde llegará para aguar la leche que se ha dejado descuidadamente abierta, pudrir las patatas y las manzanas de la noche a la mañana y mojar la leña o la turba para que no arda en la chimenea.
En Limerick y en Cork, se dice que esparce enfermedades como el resfriado, la gripe y las infecciones de garganta que oculta bajo los plieges de su gris capa.

El Hombre Gris no pronuncia sonido alguno y no reacciona cuando se le dirige la palabra, aunque se le puede ahuyentar temporalmente con la frase "Dios te bendiga", esto sólo tine un efecto temporal y regresara con virulencia en poco tiempo, crecido en su rencor y dispuesto a vengarse ante la ofensa. Se creía que un crucifijo o una medalla religiosa, sobre todo si estaban bendecidas por un obispo, le mantenían a raya. Es por eso que muchos marineros llevaban medallas en la proa de sus botes y barcos y en la comunidades rurales se colocaban crucifijos en los almacenes de patatas, carbón o turba.
La superstición y el temor es tanto, que en ciertas áreas existen caminos especialmente creados para conducir al Hombre Gris de lugar a lugar sin que entre en contacto con asentamientos humanos, y un claro ejemplo se encuentra en Fair Head en el Condado de Antrim, donde hay un puente de piedra llamado "El Camino del Hombre Gris".

Esta leyenda puede encontrarse tambien en la literatura escocesa.
ilustracion: Andrew Whitson

lunes, 19 de mayo de 2008

Purita: Ronda de preguntas y Entrevista

El pasado Sábado tuvo lugar una ponencia dentro del programa de actos organizado por el Salón Internacional del Cómic de Huelva, con una entrevista a la autora Pura Campos de la mano de Antonio Martín, tras la cual tuvo lugar una ronda de preguntas por parte del público asistente.

Gracias a la amabilidad de nuestra colaboradora Sonia, aquí os dejo los videos de la improvisada "rueda de prensa". Debido a la duración de los clips, se me hace totalmente imposible ofrecer una transcripción de los mismos, pero el audio tiene bastante calidad.








Y la entrevista de Antonio Martín, íntegra:












Espero que las hayáis disfrutado!

EL VIDEO DE BULMERS

Aquí ha sido toda una noticia, y un gran escándalo obviamente. Ocho trabajadores de la fábrica de Bulmers (sidra), realizaron el siguiente vídeo durante horas laborales que más tarde colgaron en San Youtube. El vídeo lo dice todo:





Ni que decir tiene que todos y cada uno de los implicados fueron despedidos, por infringir las normas más básicas de seguridad.

Muppets!

EL VIEJO Y EL JOVEN (MICROCUENTO)

Preguntó el viejo al joven:

-Hijo, ¿Que es lo que ves cuando miras mi rostro?

-Miedo, enfermedad y muerte.


domingo, 18 de mayo de 2008

Video de Purita, cortesía de Alikia Orange

Alikia Orange, miembro del Foro de Esther y su Mundo, nos ha hecho llegar el vídeo de Purita dibujando, in situ, para sus fans.




Gracias, Alikia!!

Otro video de Sonia que muestra cómo Purita dibuja otra dedicatoria:



Y de paso, un montaje con noticias de Esther en Tv, realizado por Sonia.



Gracias a ti tambien, Sonia!

II SALON INTERNACIONAL DEL COMIC DE HUELVA (15-18 Mayo)


Este fin de semana que hoy termina se ha celebrado en Huelva el Salón Internacional del Cómic, que por segundo año consecutivo ha contado con la presencia de la dibujante Purita Campos, de la que ya he hablado en posts anteriores, la creadora del personaje de Esther y su Mundo.

Desde aquí agradecer, ante todo, la colaboración de los organizadores del evento, a Gerardo Macías, por su puntual información, proporcionándonos el poster realizado por la autora y la programación de los actos del Salón.


El viernes 16 a las ocho de la tarde se presentó el cómic "La Historia de Lucena para niños", un cómic editado por el Ayuntamiento de Lucena (Córdoba) y escrito y dibujado por los onubenses Gerardo, Marco y Ciro Macías Prieto. La obra cuenta con un prólogo de Luis Fernando Palma Robles, cronista oficial de Lucena, y con un epílogo del poeta Luis Alberto de Cuenca.
Para la presentación de este cómic se contó en el II Salón con la presencia de José Luis Berguillos, Alcalde de Lucena, y Manuel Lara, Concejal de Cultura de la misma localidad.


Anteriormente, a partir de las seis de la tarde del mismo viernes, tuvieron lugar las conferencias en colaboración con la Universidad de Huelva: "Cómic digital: piratería, promoción y preservación de los tebeos", por Manuel Barrero, editor de Tebeosfera; y "Tintín y Hergé", por
Alicia Mariño, profesora de Filología Francesa de la UNED.
Por otra parte, desde las seis de la tarde del viernes y durante todo el fin de semana se contó con la presencia en Huelva de los dibujantes profesionales Purita Campos y Rafael López Espí.

El sábado a las seis de la tarde en la Casa Colón, Antonio Martín, editor de Glénat España y responsable de la línea de cómics de Purita de la misma editorial impartió la conferencia "La mujer en el tebeo español, personajes y autoras. Sociología de la historieta de género". A continuación, Antonio Martín entrevistó ante todo el público asistente a Purita Campos.

Y de ello tenemos reportaje gracias a una de sus fieles seguidoras, Sonia (responsable de la web Coleccionismo Disney), que ha sido tan amable de enviarnos las fotos de su visita al Salón y de la exposición dedicada a Esther, así como una crónica personal de su experiencia. También destacar las palabras de otras dos participantes del Foro de Esther, Iremar y Alikia Orange, que declaraban respectivamente tras su visita a la Casa Colón:

- "Esta mañana fui al expocómic, a eso de las 11.30 , quería que Purita me dedicara un libro, uno de los antiguos, el nº 5 que era mío , los demás eran de mi hermana. Cuando llegué no había mucha gente y me puse a la cola, había gente que venía de Sevilla para que Pura les firmara.
Charlé con personas muy amable , madres con sus hijas , chavalas que venían con sus novios... y cuando me tocó no supe qué decirle. Me dijo Pura que tenía el libro muy bien conservado y me dibujó a Esther en un plis plas. La verdad, fue muy emocionante y grato
".
(Iremar)



-"He ido arrastrando a mis dos mejores amigas, que han aguantado religiosamente la cola conmigo para conseguir el autógrafo de Purita. Por desgracia no he podido asistir a la entrevista que le hacían hoy. Por mi parte he sacado una foto de cada lámina que había expuesta y tengo un vídeo del momento en el que me hacía un dibujito de Esther precioso, casi ni me lo puedo creer, de lo emocionada que estoy. El salón de este año ha estado mucho mejor que el año pasado, además qué bonita es la Casa Colón, tantos años que llevo en Huelva y nunca la había visto. La gente de la cola simpatiquísima, me ha encantado charlar con otras estherianas, aunque fuera un poquito. Y bueno, me he comprado Jana, qué ilusión me ha hecho, estoy deseando leerlo ya mismo. Purita es un encanto, ha estado todo el día firmando y dibujando, y cada una llevábamos varios libros. Qué máquina está hecha esta mujer, tiene que acabar derrotada, pero no nos quería dejar sin un dibujito suyo por lo menos. Un encanto, lo dicho."
(Alikia Orange)



Y aquí os dejo la crónica de nuestra reportera especial, tal como ella la vivió (nunca una fan de Purita puede expresar mejor lo que se siente al conocer a una mujer con los pies bien firmes en la tierra y una vida volcada a sus admiradores).



"Llegamos a la Casa Colón a las 10 de la mañana , mi marido me ha hecho de fotógrafo, y cuando entramos vimos que justamente Purita y Francisco pasaban por nuestro lado, yo casi me pongo a pegar botes pero no me atreví a decir nada por culpa de mi dichosa timidez, sólo los seguimos para ver dónde estaba el stand para la firma, pero resulta que éramos los únicos a esa hora y como no nos vieron, se fueron a desayunar, segun nos informó el organizador de aquello, que nos invitó muy amablemente a subir a ver la exposición de la planta superior y como desde luego pensábamos verla, subimos encantados y... qué preciosidad de cuadros, estaba encantada, además aún no había nadie y me hice fotos con cada cuadro, qué bien me lo pasé haciendo la tonta posando sin cortarme un pelo.
Tras ver la exposición nos fuimos de nuevo al stand de Purita pero aún no había nadie así que nos quedamos esperando en unos jardincitos que rodean una fuente, yo estaba muy muy nerviosa, no paraba de mirar a la puerta para ver si llegaba Purita, ya que mi marido me dijo que le pidiera hacernos una foto ahí en la fuente que me gustó tanto, y cuando por fin aparecieron... no me atreví a decir nada, me moría de verguenza, pero mi marido muy decidido va hacia ella para decírselo y justamente le suena el móvil a Purita, así que intento frustrado.

Fuimos rápidamente hacia el stand y ya había dos personas esperando para la firma, yo atacada de los nervios, nos ponemos en la cola y cuando aparece Purita por la puerta ... mi marido decide de nuevo pedirle que pose conmigo, y... hace entrada el alcalde de Huelva, José Luis Berguillos, a saludar a Purita con un cámara y más personas alrededor, de nuevo mi marido se queda planchado el pobre y da media vuelta, a mí me iba a dar un infarto ya, por lo menos nos reímos con todo esto. Después de los saludos del alcalde al fin pude hacerme las fotos con Purita.


Sólo puedo decir que nos hemos quedado encantados con la simpatía, amabilidad y la forma de ser en general de Purita y Francisco (su marido), de verdad, qué encanto de pareja, gracias a ello pude hablar con Purita sobre Esther, sin creerme del todo que estaba ahí hablando con ella, era increíble, ¡con lo cortada que soy!, qué contenta estoy, qué emocionante fue, de verdad.


Nos pusimos en la cola de nuevo, éramos los terceros ahora, bien mereció la pena perder el primer lugar por todo lo anterior. Purita empezó a dibujar una Esther en un tomo,era preciosa,tanto como la que me hizo después a mí,¡qué maravilla!,es un tesoro,como le dije a Purita ahora me va a dar pena tocar el libro no vaya a estropearse mi Esther, además, está dedicada "de parte de Esther y Purita para Sonia",me hizo mucha gracia,es preciosa la dedicatoria. Me preguntó si me gustó el segundo libro de las nuevas aventuras y le comenté que me había encantado,que todo era precioso y que nos había dejado con ganas del siguiente, entonces me dijo que con el tercero nos va a dar algo, nos dejará mucho peor que éste, o sea, que el librito promete. También me firmó el primer tomo que tuve con ocho añitos,es mi preferido y no podía dejar pasar la oportunidad de que me lo firmara..."

Según declaraciones de los organizadores del evento, el resultado de este año ha sido muy positivo, tanto de participación del público como de "feeling" con los invitados. En breve os haré un resumen de la entrevista que antonio Martín le hizo a nuestra Pura. Mientras tanto, os dejo algunas fotos más de las láminas expuestas en la Casa Colón, cortesía, de nuevo, de Sonia.











jueves, 15 de mayo de 2008

TARDE DE CINE

Solíamos is al cine cada Domingo, la cartelera no ocultaba misterio alguno para nosotros, cinéfilos empedernidos. A veces, incluso, hacíamos sesión doble, como cuando fuimos a ver Down with Love y cuando acabamos descubrimos que estaba a punto de comenzar Finding Nemo. Salimos, compramos la entrada, y volvimos a entrar.


Sin embargo, nuestras visitas semanales se vieron interrumpidas abruptamente debido a la clausura del único multicines del centro. Nuestra alternativa era ir hasta Dooradoyle (30-40 minutos andando, autobuses cada 20 minutos o media hora cuando deciden aparecer), al Omniplex. La desventaja de este cine es que, al encontrarse en un centro comercial, atraía principalmente a la clase de chusma que no querrías ver tampoco cerca de tu casa. Más de una vez hemos salido malhumorados por el comportamiento de "críos" que, en muchos casos, no tenían ni la edad adecuada para el film que se estaba mostrando, claro que este cine parecía no tener mucha vigilancia al respecto. Acudir a ver una película se convirtió en una lotería en la que nunca sabías si podrías escuchar algo o te tocaría un gilipollas al lado (es que debemos ser imanes para gentuza).

Si hay algo que odio es la gente que va al cine y no para de hablar durante toda la película. O aquel que, o se cree que su novia/amiga es completamente idiota y ha de contarle lo que está sucediendo según sucede. O las señoras que en medio de una escena parecen recordar un suceso muy importante, tanto, que no pueden dejar de contárselo a sus acompañantes.

Y el sonido enervante de los paquetes de patatas o similares. ¿Pero quién tuvo la felíz idea de permitirlos en la sala? Deberían de ser prohibidos del mismo modo que el fumar. Además, naturalmente, los consumidores del tipo de producto envasado en dichas bolsitas, esperan a que esté empezando la película para empezar a lidiar con el envoltorio. Creo que los niños de cinco años se comportan con mayor decoro.

Anoche fuimos al cine, a ver Iron Man. Hemos desistido ya de ir al Omniplex, las palomitas allí hasta saben rancias y como digo, está frecuentado por cierta gente a la que sólo me apetece escupir, por lo que fuimos a Storm, un multicines que abrió hace menos de dos años y cuyos asientos, distribución de sonido y crujientes palomitas, eran lo mejor de lo mejor. Un poco más caro que el Omniplex al principio, pero el otro, en lugar de mantener un precio competitivo, lo subió también, sin mejorar sus servicios.

Pero ayer me desilusionó bastante. La última vez que fui a Storm fue hace ya meses. Casi hemos dejado de ir al cine por pereza, porque Storm está más lejos que el Omniplex y la velada de cine se nos monta en casi 40 euros entre los dos. La entrada es 9.50, las palomitas 7.80 y tenemos que coger un taxi para ir y venir ya que no se puede confiar en el horario de los autobuses a esa zona. Sin embargo, ayer comprobé que las palomitas han subido de precio y bajado de calidad (tenían demasiada sal y estaban un tanto duras), y los lavabos, antes impolutos, estaban completamente abandonados. De los diez cubículos, 4 tenían las cerraduras rotas, y el toilet está demasiado alejado de la puerta como para estar haciendo posturitas tratando de mantenerla cerrada con un brazo extendido. La mayoría tampoco tenía papel higienico o no lo tenían en sus contenedores para tal uso, sino que había rollos de papel sueltos por el suelo.
Y yo me pregunto, ¿Qué clase de guarra usa el papel higiénico y luego deposita el rollo en el suelo, cuando se dejó originalmente o sobre la cisterna o sobre el contenedor de papel? ¿No se dan cuenta de los gérmenes que se acumulan en el suelo de un lavabo?

Tema aparte, habrá que hacer post sobre el estado de algunos servicios públicos.

Volviendo a la película. A punto de empezar, entran un grupo de 5-6 chavales jóvenes, bien vestidos, buff, no es chusma. El cine medio vacío (apenas una docena de personas) y se tienen que sentar detrás nuestra. Para colmo, eran de esos de piernas largas (en este cine hay muchíííísimo espacio entre asiento y asiento), pero más que largas, es que son de la clase de individuos que quieren sentarse como se sientan en el sofá de su casa: totalmente apoltronados en la silla, por lo que nos sometieron a un masaje inesperado en la espalda, y también debían ser de culos inquietos, a juzgar por lo que se movían. Sin contar un par de flatulencias seguidas de risas.

Gracias a Dios la película estaba bien y los mantuvo enganchados, como me mantuvo a mí, que no quise volverme y decirles nada por no perder ni un fotograma. Me encantan los cómics de Marvel y por regla general sus adaptaciones en la gran pantalla me han gustado bastante (excepto esa horrible y aburrida cinta con Nicholas Cage, Ghost Rider). Eso, y no perderme la aparición estelar de Stan Lee, como siempre.

Y por supuesto, al finalizar el film, todo el mundo abandonó la sala (los pocos que estaban en ella en un Miércoles), y sólo nos quedamos nosotros y alguien más en otra fila. Tras los casi 10 minutos de créditos, y como es norma habitual en el cine de Marvel... un poquito más de película... Casi adelanto de un follow up.


Queremos volver en un par de semanas para ver Indi, claro. Esperaremos de nuevo a que pase el revuelo de la premiere y nos acercaremos un día entre semana. Creo que pasaré de las palomitas y en todo caso, llevaré mi propio papel higiénico.


Nada es lo que solía ser.

miércoles, 14 de mayo de 2008

COCINERO ANTES QUE FRAILE

He hablado con anterioridad de mi abuelo paterno, pero he mencinado siempre de pasada a mi abuelo materno, en cuya casa me crié, en aquel cuartito multiuso.


Mi abuelo siempre fue un librito de historias. Su mente parecía no tener límites, pero por desgracia, el alcohol jugaba una gran parte en esa imaginación ilimitada. Muchas veces pensé que la locura anidaba en él, y rezaba por que no fuera algo genético, o no corriera en la sangre. Tal vez en el fondo, corre en mis venas, dando rienda suelta a mi imaginación, que procuro canalizar por otros medios.



Mi abuelo fue cocinero. En la mili, donde hacía caldos y potajes y donde tenía a su inseparable perro Canelo, que creo que luego adoptó personalmente, hasta que el can murió de puro viejo.



Mi abuelo fue legionario. O eso decía él, que durante años guardó su uniforme. Con orgullo enseñaba las cicatrices que la metralla dejó en sus piernas para siempre. En la solapa de sus camisas abiertas, o en las chaquetas, siempre llevaba su insignia del club de legionarios.
Mi tío me dijo un día que no había ni llegado a ir al frente, que había sido corneta en la legión a los 14 años y que, herido por la metralla, eso sí, fue enviado a casa tras sólo dos días en el "trabajo".



Mi abuelo fue sacerdote protestante. Numerosas biblias abultaban su bilbioteca, libros de protestantismo, la vida de Martin Lutero y otros personajes claves del luteranismo. Dicen que esto es lo que perdió para siempre su mente. Mi abuelo era el epítome del protestantismo, obsesionado con ello y total detractor de cualquier otra religión.



Mi abuelo era libre pensador. Es decir, pensaba lo que le daba la gana. Para él, no existía más música digna de ser oída que las marchas militares (creo recordar aquellas cintas de casette en eterno sonar en su viejo armatoste de metal plateado y plástico duro negro, con marchas militares de cualquier tipo y bando). Y por supuesto, estaba el Gran Maestro Gardel. A mi abuelo le apasionaba Gardel y sus tangos lánguidos. Porque para su libre pensamiento, todos aquellos melenudos en látex y ropas eléctricas no eran más que una panda de "maricones" (debía ser, también, xenófobo, pues), y su frase cada vez que uno de estos aparecía en televisión era: "Pobre de los panaderos que se tienen que levantar a las cuatro de la mañana para hacer pan para estos tipos".
Admiraba a Charlie Chaplin, al Gordo y al Flaco y a Buster Keaton, su favorito.

Mi abuelo era alcohólico. Un borracho, vamos. Unas veces más y otras menos, por temporadas. Creo que su peor época fue en los setenta, ahí lo pasé mal viendo el trato que daba a mi abuela. A mí jamás me puso una mano encima, a mi madre y mi tío tampoco, pero a mi abuela la llevaba por la calle de la amargura. Nunca la he visto con moratones ni mucho menos. No le vi nunca pegarla, pero sí creo que su abuso era más bien psicológico.

Pero mi abuelo, ante todo, era un abuelo. Ese que te cuenta historias, el que te trae regalos sin tener que ser una fecha determinada. El que te come a besos y te mima en todo lo que puede. El que a la llegada de los "Todo a cien" siempre me traía pendientes horrorosos, porque sabía que me vuelven loca los pendientes, de todas las formas y colores, pendientes que nunca me puse y muchos de los cuales aún conservo.

Mi abuelo, el coleccionista de relojes, de mecheros y de objetos inútiles. Sus relojes (un cajón lleno de ellos, de todas clases, formas y tamaños), nunca funcionaron. Algunos eran antiguos, valiosos, de marca. Otros eran de mercadillos, comprados por cincuenta pesetas. Se entretenía desmontándolos, estudiando su mecanismo y volviéndolos a montar (había una cajita de latón a donde iban a parar todas aquellas piezas que al recomponer el reloj, "sobraban"). Casi del mismo modo compulsivo, coleccionaba mecheros de todas clases y "tonterías" varias. como su nieta, la que suscribe.



Sin embargo, abuelo, tengo que pedirte perdón por haberte ignorado en la calle cuando iba con mis amigas, por sentirme a veces avergonzada de tí. Por cruzar de acera o entrar corriendo en cualquier tienda. Por mirar escaparates y hacerme la "longui". Te pido perdón por no haberte querido más, por no haberte sabido querer lo suficiente. Fuiste un buen abuelo, uno que estuvo cerca y que me acogió cuando necesitaba calor humano. Eras un pesado, un trolas y un amante del valdepeñas, pero te quise, y me dolió que la última vez que te vi estuvieras en una cama entubado y, según los médicos, sin oirme. Pero sé que tú sabías que yo estaba allí. Que volé corriendo para verte antes de que fuese tarde.

Tal día como hoy te fuiste para siempre, pero en mis sueños, que los tengo, sigues vivo. Todo un señor. Mi abuelito lindo, que me enseñó las horas del reloj con una vieja pizarra, que me enseñó a leer y me inculcó el amor por los libros.

Y mira qué día tan bonito hace hoy. ¿Lo ves? Es por tí.

martes, 13 de mayo de 2008

CONVERSACION CON MI JEFE ESTA MAÑANA

YO: -"Ayer fui al dentista y me dijo que la endodoncia me cuesta 1000 euros (sí, mil), y que no
me la hace él, que tendrá que referirme a un especialista en otro pueblo, además. Así que
he llamado a mi hermana en España, que es enfermera dental en una consulta y me lo voy
a hacer allí, el sábado me comenzará aquí el tratamiento y me matará el nervio, pero me
la acabaré en España. En cuanto vea una oferta de vuelo, os aviso y me voy unos días,
me ha dicho que el empaste provisional me durará unos 6 meses, así que no me voy a ir
mañana mismo."

MI JEFE: -"¿Y por qué no te sacas la muela? Sería mucho más económico."

YO: -"Porque a la tierna edad de 38 años, me gustaría conservar mi dentadura un poquito más."


Nos ha jodido, así funciona todo.

lunes, 12 de mayo de 2008

QUIERO SER MUÑECA


Miro mis muñecas posando estáticamente desde sus estanterías, congeladas en su eterna sonrisa, y deseo ser un trozo de plástico con ojos de margarita y labios de carmín.

A ellas nos les duelen las muelas.

domingo, 11 de mayo de 2008

Los Crímenes del Mes de Mayo (El rincón de Lar)


He puesto este título al post -Los Crímenes del mes de Mayo-, en honor a una Chirigota de hace ya bastantes años, que bajo este nombre intentaban criticar el sablazo virtual al que se somete a los padres con hijos en edades de Comunión en cuanto llega la "temida hora".

Escribir sobre las comuniones se lo debo a Urko y sus colaboradores (Wilma y Lola), que comenzaron el tema en su blog, y me hicieron rebuscar en mi caja de hojalata de Colacao para hallar aquellos nombres olvidados en esas tarjetillas de recuerdos de las Primeras Comuniones de algunas compañeras de clase y alguna primita.
Mías no tengo. No guardo fotos de traje de novia prepúbere, ni retículas, ni libros de tapas de nácar impoluto, ni guantes amarillentos por el paso del tiempo o velos con flores de raso.
Yo fui niña sin comunión ni vestido blanco, sin cruz de oro ni calcetines de puntillas ni rosario. La ostia siempre sería un misterio para mí
Mis padres eran protestantes y, aunque yo salí protestona, envidiaba con saña a todas mis amiogas que hacían una vida normal y vivían la llegada de "aquel momento" para mí incomprensible, con tanta ilusión. Yo me alejaba de los corrillos en los que mis compañeras hablaban de nácares, de perlas, de cruces, de biblias nuevas y guantes de blonda. Me sentía excluída de una sociedad "secreta" que nunca iba a conocer. Otro resentimiento más que almacenar contra mis progenitores. Nacer en familia protestante y crecer en colegio de monjas es un tanto confuso cuando eres una niña que quiere "integrarse" con el resto de las 41 niñas que comparten aula, y mis comienzos no fueron para nada fáciles.
En Primero de EGB, la monja que nos daba la asignatura de Religión me enviaba al pasillo durante la hora de dicha asignatura, ya que mis padres no querían que me dieran este tema. Tres días después regresé a casa frustrada y llorando, sin comprender por qué se me enviaba al frío corredor, donde debía sentarme en el sucio suelo de mármol durante una hora hasta finalizada la clase, para mofa y escarnio, no sólo de mis compañeras, que pensaban que se me habia castigado por algo "realmente malo", si no del resto de alumnado que pasaba ante mí, camino de los servicios.
Despaché mis cuitas a mi madre, que fue a hablar con la directora y convinieron que podría quedarme en el aula, exenta de los exámenes. Naturalmente hacía los examenes como el resto de la clase, para que tampoco se me considerase "una paria", pero no se me calificaría, la asignatura ya se me consideraba aprobada.
Tras la primera evaluación mi madre fue llamada al despacho de la directora de nuevo. Sin haber tenido que atender en clase, sin la obligación de completar el exámen, había sacado la nota máxima de la clase. Eso, supongo, era debido a la "escuela dominical" de la pequeña capilla a la que tenía que acudir con mis padres cada semana.
Ni qué decir tiene que la última vez que pisé aquel antro fue a los once años, cuando con una precoz independencia dejé bien claro a mis progenitores que no estaba por la labor de levantarme los domingos a las diez de la mañana para acudir a la llamada de una "fé" que no me interesaba. Asombrosamente, me dejaban en casa a mi libre albedrío.
Pero, como todos los que dicen predicar con el ejemplo, cuando a los 14 años les comuniqué mi decisión de "pasarme al bando contrario" (yo sólo quería ser normal) y hacer la confirmación (para mí sería, en realidad, la Primera Comunión), la reacción fue muy distinta y las amenazas cayeron a la misma velocidad que los "sopapos".
Así que, a día de hoy, el único recuerdo que guardo de la Comunión son las estampitas de los demás.